Independientemente de que lo compres en el supermercado o te marques una de las recetas de helado casero existentes como este fabuloso helado de cheesecake, lo ideal es mantenerlo en buen estado el mayor tiempo posible almacenándolo cuidadosamente. Quizás el helado no dure demasiado en tu casa... pero en caso de que sí lo haga, conservándolo de la manera correcta, estará perfecto cada vez que quieras disfrutarlo.
Los mejores trucos para conservar el helado correctamente
Teniendo en cuenta una serie de aspectos fundamentales podrás conservar el helado en óptimas condiciones más tiempo. Te adelantamos que no importa el tamaño del recipiente, pero sí el material con el que está hecho.
Verifica la temperatura del congelador
Parece obvio pero mucha gente o lo desconoce o no lo aplica. El primer paso para un correcto almacenamiento del helado es asegurarse de que el congelador tenga la temperatura adecuada. Generalmente la temperatura del congelador se establece entre los -15 ºC y los -22 ºC, pero para que el helado se conserve de manera óptima, recomendamos que lo ajustes a -18ºC.
Evita que los olores se mezclen
¿Alguna vez has notado que los olores fuertes de la nevera aparezcan también en el congelador? Al almacenar alimentos con olores potentes, si no están bien cerrados desprenden partículas volátiles que pueden pasar a otros alimentos. La mejor solución al problema es eliminar los malos olores de la nevera. Además de mantener estos alimentos bien sellados, es fundamental que el helado se mantenga en su envase original, o bien si es casero que lo conserves en un recipiente con cierre hermético de plástico.
El envase ideal para el helado
Lo mejor será que conserves el helado en su envase original, eso sí, en caso de que el envase sea de papel cartón, lo mejor será traspasarlo a un envase de plástico con cierre hermético, como una tarrina de helado vacía que tengas en casa. Esos envases están especialmente diseñados para conservar el helado en perfectas condiciones durante más tiempo.
Mantén una temperatura consistente
Si el helado se derrite y se vuelve a congelar, su calidad irá menguando considerablemente perdiendo esa textura cremosa que lo caracteriza. Debes evitar conservarlo en la parte delantera junto a la puerta del congelador y optar por guardarlo en la parte trasera, lo más al fondo posible para que mantenga una temperatura constante.
