La gran mayoría de amantes del queso adoran la tarta de queso o cheesecake. Pues, imagínate esta tarta convertida en helado... Sin duda, ¡es lo más! Esta receta se puede elaborar de dos maneras:
- Con heladera: la heladera nos ayuda a batir el helado mientras se congela, a darle consistencia y volumen. Es un utensilio muy sencillo de utilizar. En este caso, cuando tenemos la masa elaborada, la vertemos en el cuenco de la heladera previamente congelado —esto no es necesario para las heladeras que disponen de compresor— y dejamos que el helado se vaya formando durante 30 o 45 minutos. Una vez pasado este tiempo, simplemente tenemos que verter el helado en un cuenco y llevarlo al congelador hasta su consumo.
- Sin heladera: aunque la heladera nos facilite la elaboración de helados caseros, no es imprescindible. Para hacer helado casero sin heladera, una vez elaborada la mezcla del helado, la pasamos a un cuenco apto para el congelador, con tapa para evitar que el helado absorba olores de otros alimentos. Durante las 3 primeras horas, es importante ir removiendo el helado cada 40 minutos aproximadamente para evitar que se cristalice y así aportar aire al helado y que este adquiera cremosidad. No hace falta remover mucho, pero sí lo suficiente para que el helado coja consistencia.
Ya sea con o sin heladera, siguiendo los sencillos pasos de esta receta conseguiremos de forma fácil un maravilloso helado de cheesecake.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 5 minutos
- Tiempo total: 5 minutos (más el tiempo de congelación)
- Raciones: 6
- Categoría: postre
- Tipo de cocina: internacional
- Calorías por ración (kcal): 369
Ingredientes del helado de cheesecake para 6 personas
- 500 ml de nata para montar
- 250 ml de leche condensada
- 100 g de queso para untar
- 4 cucharadas de mermelada de arándanos
- 5 galletas maría
- Arándanos (para decorar)
Cómo hacer helado de cheesecake
Para empezar, montamos ligeramente 500 ml de nata para montar. Esta tiene que estar fría ya que, de lo contrario, no se montará correctamente.
A continuación, agregamos 250 ml de leche condensada y 100 g de queso para untar. Mezclamos todo muy bien.
Añadimos a la mezcla 4 cucharadas de mermelada de arándanos y volvemos a mezclar para integrarlas. En este momento observaremos que la mezcla se vuelve ligeramente morada.
Ahora es momento de introducir 5 galletas maría partidas en trozos pequeños para que la experiencia sea lo más parecida posible a comernos una cheesecake.
Para acabar, colocamos la mezcla en nuestra heladera que habrá estado en el congelador un mínimo de 8 horas y dejamos que se vaya formando el helado. Este paso nos llevará aproximadamente 45 minutos o hasta que veamos que la mezcla ya tenga textura de helado. En el caso de no disponer de heladera, vertemos la mezcla en un recipiente apto para el congelador y la removemos cada 40 minutos, durante las 3 primeras horas. Con esto conseguiremos que el helado no se cristalice y quede más cremoso. Cuando lo tengamos listo, lo servimos con la ayuda de una cuchara para helados y decoramos con galletas maría y algunos arándanos al gusto. ¡A disfrutar!
Resumen fácil de preparación
- Montamos la nata ligeramente
- Agregamos la leche condensada y el queso de untar, y mezclamos
- Añadimos la mermelada de arándanos y mezclamos todo bien
- Introducimos trozos pequeños de galletas maría e integramos
- Introducimos la mezcla en la heladera y dejamos que se forme el helado o bien la congelamos removiendo cada 40 minutos mientras se congela. Servimos el helado decorado con galletas y arándanos