Alarga la vida de tus hierbas aromáticas con este sencillo truco de cocina

Ramillete fresco de albahaca en un tarro con agua
Con un sencillo gesto podrás mantener tus hierbas aromáticas en buen estado durante más tiempo conservando su aroma, frescor y sabor semanas.
Por Marina Blanco
27 de marzo de 2024

Cuando compramos hierbas aromáticas con la finalidad de potenciar el sabor de los platos o hacerlos más vistosos la idea que tenemos en mente es siempre la misma: que estén lo más frescas posibles. Y es que las hierbas aromáticas frescas otorgan a nuestros platos sabores muy característicos, además de hacerlos mucho más vistosos en caso de que las utilicemos como decoración.

Lo mejor de conservarlas correctamente es que alargaremos su vida útil pudiéndolas emplear durante semanas en diferentes preparaciones en las que además de aprovechar las hojas, podremos también sacar provecho del tallo. Te contamos el secreto para mantener las hierbas en buen estado durante semanas, una forma muy fácil y eficaz de conservarlas.

Pluma de cerdo ibérico a las finas hierbasDamián Serrano

Cómo conservar las hierbas aromáticas

Al igual que cuando compras flores las colocas en un florero con agua para que aguanten más tiempo, lo mismo podrás hacer con las ramitas de albahaca, perejil o cilantro. Para mantener su verdor brillante y ese frescor tan característico nada mejor que conservar las hierbas aromáticas siguiendo este sencillo consejo: mantenerlas en agua.

La mejor manera de hacerlo es conseguir un vaso alto o tarro de cristal vacío, llenarlo con una tercera parte de agua, y colocar las hierbas en el interior. Si además las cubrimos con una bolsa de plástico fino y cerramos con hilo de cocina, se creará un microclima en el interior que protegerá y conservará las hierbas durante semanas.

Podrás dejarlas simplemente en la encimera, o si quieres que aguanten algo más de tiempo, guardar el tarro en la nevera. Si vas a conservarlo en el frigorífico, nuestra recomendación es que lo coloques en la parte baja de manera que corra menos riesgo de volcarse cuando vayas a coger algo que esté colocado junto al tarro.