Las granadas se han cultivado a lo largo de la historia por toda la cuenca mediterránea y sus pueblos han sabido sacar el mejor provecho a esta fruta tan peculiar que además de enriquecer las recetas embellece cualquier plato. Disponible en fruterías y mercados entre los meses de septiembre y noviembre, la granada aportará a tus recetas una mezcla entre dulzor y cierto amargor además de una curiosa textura crujiente.
Formada por numerosas perlas de un tono que varía entre el rosa claro hasta el rojo, esta fruta además de utilizarse para recetas de postres es ideal para embellecer ensaladas como esta ensalada de escarola, granadas y nueces, cremas y sopas e incluso para hacer un refrescante zumo de granada.
Cómo sacar fácilmente los granos de la granada
Aunque existan diferentes métodos para pelar y desgranar esta curiosa fruta, como por ejemplo cortarla separándola en gajos para después ir raspando con la cuchara uno a uno hasta que todos ellos queden limpios, te presentamos el método definitivo, mucho más simple y sin apenas esfuerzo. Todo lo que necesitarás será un buen cuchillo afilado y un cazo pequeño o una cuchara sopera, además de un cuenco amplio que recoja todos los granitos de la fruta.
Apoya la granada sobre la tabla de cocina con la corona hacia arriba y córtala de manera horizontal de modo que obtengas dos medias granadas. Prepara un cuenco amplio, sujeta una de las mitades de granada con una mano de manera que quede boca abajo y con la otra golpea el exterior de la granada con un cazo pequeño o una cuchara sopera hasta que vayan cayendo poco a poco todos los granos. Si queda alguno dentro, sólo tendrás que raspar un poco con la cuchara hasta que la piel quede totalmente limpia. Repite el proceso con la otra otra mitad de la fruta y tendrás tu granada pelada y desgranada en menos de 1 minuto.
