Dicen que Los Marinos José de Fuengirola es el templo de los mariscos —«vivos en su mayoría», apostillan desde el negocio el restaurante— y del pescado fresco de la Costa del Sol. Una afirmación rotunda que se constata visitando su más que apreciada sala. Primero, observando el surtido de manjares en exposición. Y, luego, degustándolos.
Porque quienes conocen bien la playa de El Carvajal de esta población malagueña, un pequeño paraíso próximo a la cercana Benalmádena, saben que este establecimiento está lejos de ser un chiringo playero cualquiera. Con treinta años a las espaldas, a José Sánchez y su familia, sus artífices y responsables, se los conoce.
Saben que el producto que se exhibe en las mesas que se encuentran nada más cruzar el umbral de la puerta es capturado, en parte, por el barco pesquero que los Sánchez poseen. Que la materia prima que llega a la mesa hace escasas horas estaba en el mar. Que lo que se ofrece ese día, en ese momento, es lo mejor y más fresco.
Aplicando a cada género la técnica adecuada, haciendo uso de él en la receta que de una mejor manera lo aproveche, en Los Marinos José consiguen ensanchar las virtudes y darle todavía más lustre si cabe. Porque en la sencillez, la sensatez y la sinceridad de un producto y una elaboración se encuentra la mayoría de veces la excelencia.
La liturgia en este santuario marino comienza con los aperitivos, con apariciones estelares de la pipirrana, una sublime ensalada de pimientos que no necesita más. Le pueden seguir un exquisito salpicón de marisco, unas coquinas o boquerones al limón. Al festín con sabor a absoluto mar pueden sumarse unas quisquillas, de paladar fino pero intenso, boquerones, capaces de ofrecer una explosión de sabor sin igual, así como unos chopitos con su tinta a la plancha, que no necesitan de más, o el hígado de rape frito capaz de encandilar a cualquiera, especialmente si no ha tenido nunca el gusto de probarlo.
A estos platos se unirán otros pescados de mayor tamaño, apenas intervenidos, como el mero, la dorada, la lubina, el rape, o la gallineta, normalmente ofrecidos hechos al horno, fritos o a la sal. Cocinados en su punto, ese al que pocas casas tienen habituado al comensal.
La propuesta de este restaurante del paseo marítimo Carvajal de Fuengirola termina con una bodega de más de dos centenares y media de vinos para regar el ágape, una concreta pero acertada selección de quesos, la presencia de un buen pan y el brillo de postres como el de milhojas de nada, completamente casero.
Los Marinos José
Paseo Marítimo Rey de España, 16129640 Fuengirola (Málaga)
952661012
www.losmarinosjose.com
Mediterránea
35€-60€
