Las calles de Valencia ya huelen a pólvora, un olor típico del mes de marzo que se entremezcla con los aromas y sabores de su gastronomía. Durante las Fallas, las calles valencianas se llenan de ninots, de flores, de luces, de colores, de fuegos artificiales, de mascletás, de música y de gente, tanto de valencianos como de miles de personas de otras partes de España, incluso del mundo, que se animan a vivir estas fiestas.
Como en una buena fiesta local, las Fallas también tienen su gastronomía típica que cualquier persona que esté estos días callejeando y visitando monumentos falleros debería probar sin falta. Queremos que, literalmente, te comas Valencia. Por eso, a continuación, te presentamos una selección con los 6 bocados valencianos que no te puedes perder durante las Fallas.
Buñuelos de calabaza
En toda ruta gastronómica de las Fallas de Valencia el dulce nunca puede faltar y suele venir en forma de buñuelos de calabaza, «bunyols de carabassa» en valenciano. Son considerados el dulce fallero más emblemático que se apodera de las calles en estas fechas tan señaladas para la capital del Turia. Son sabrosos y aromáticos gracias a dos de sus ingredientes, la calabaza y la ralladura de naranja (valenciana, por supuesto).
Chocolate con churros
Al igual que los buñuelos de calabaza, el chocolate con churros es otro imprescindible del que ir disfrutando mientras se da un agradable paseo visitando los diferentes monumentos falleros. Las míticas churrerías y chocolaterías ambulantes trabajan sin descanso, día y noche, durante estos días para abastecer a los valencianos y turistas que por ella se acercan.
Los bocatas del esmorzaret
El esmorzaret es el momento perfecto del día para deleitar al paladar con los sabores más intrínsecos de la gastronomía de Valencia. Por si no conoces este término, el esmorzaret es el almuerzo valenciano que se toma entre el desayuno y la comida del medio día en el que el plato estrella es el bocata. Algunos de los más típicos son el bocadillo Almussafes (relleno de sobrasada con cebolla caramelizada y queso fundente), la brascada (ternera, jamón serrano y cebolla pochada) y el blanco y negro (con embutido de calidad, como son la longaniza blanca y la morcilla).
Horchata
La horchata de chufa es la bebida por excelencia en Valencia, un bebida que se toma fría para refrescarse de las altas temperaturas tan típicas de esta zona de España. Si nunca la has probado, las Fallas es el mejor momento para hacerlo y, además, deberías tomarla acompañada de unos fartons, unos bollos cilíndricos, esponjosos y con glaseado de azúcar que maridan muy bien con la horchata.
Cremaet
El cremaet, también conocido como carajillo quemado, es el café que más toman los valencianos y es el postre perfecto para culminar un buen esmorzaret faller. Se elabora con café junto con un licor, los más usados son ron o brandy, y se le añade también azúcar, canela en rama y piel de cítricos para equilibrar su sabor.
Paella valenciana
La embajadora de la gastronomía de Valencia, la paella valenciana tradicional, también debe estar incluida en esta ruta fallera. La puedes comer tanto de día como de noche, siempre entra bien. Si eres valenciano, puedes comerla con familiares y amigos en los casales falleros y si estás de visita por la ciudad en alguna arrocería o restaurante de comida tradicional.
