La tarta de fresas que vamos a hacer en esta ocasión es una tarta rellena de crema pastelera con una base de masa horneada y cubierta con fresas. El resultado es un postre delicioso. Esta tarta no solo es llamativa por el intenso color rojo que aporta la cobertura de fresas sino también por el delicioso contraste de sabores y texturas entre la base crujiente, la suave crema pastelera y las fresas frescas que cubren la tarta.
Para su elaboración, en primer lugar hemos optado por hacer la masa quebrada, de esta manera, la podremos dejar reposar en la nevera mientras preparamos la crema pastelera. Para montar la tarta, debemos hornear primero la base sola y luego dejarla enfriar un poco antes de rellenarla con la crema. Para terminar, colocaremos las fresas en toda la superficie, las protagonistas de esta deliciosa tarta. Esta tarta se puede simplificar y hacer en versión rápida si en lugar de hacer la masa casera, optáis por comprar una masa de hojaldre o masa quebrada de buena calidad.
Este es un postre clásico que, aunque se compone de dos elaboraciones simultáneas, la base y la crema del relleno, resulta bastante fácil de hacer y el resultado es muy rico. Un dulce ideal para casi cualquier ocasión, ya sea para un cumpleaños, para servir de postre o bien para amenizar una merienda dulce acompañada de una infusión o de un café con leche
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 1 hora
- Tiempo de cocinado: 30 minutos
- Tiempo total: 1 hora y 30 minutos
- Raciones: 8
- Categoría: repostería
- Tipo de cocina: internacional
- Calorías por ración (kcal): 479
Ingredientes de la tarta de fresas y crema
Para la base:
- 250 g de harina de trigo
- 160 g de mantequilla
- 2 huevos
- 1 pizca de sal
- 2 cucharaditas de esencia de vainilla
- 50 g de azúcar glas
Para la crema pastelera:
- 4 yemas de huevo
- 125 g de azúcar
- 50 g de maicena
- 500 ml de leche
- La ralladura de 1 lima o de medio limón
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
Para la cobertura de fresas:
- 700 g de fresas
- 20 g mermelada de albaricoque
Cómo hacer la tarta de fresas y crema
En primer lugar, vamos a hacer la base. Para ello mezclamos en un bol 250 g de harina de trigo con 160 g de mantequilla fría cortada a dados. Mezclamos bien hasta que consigamos una textura parecida a la arena.
Cuando tengamos la textura deseada, agregamos al bol los ingredientes restantes de la masa: 2 huevos, 1 pizca de sal, 2 cucharaditas de esencia de vainilla y 50 g de azúcar glas. Mezclamos hasta conseguir una mezcla homogénea. Si se nos pega en las manos, incorporamos un poco más de harina hasta que no se pegue. La envolvemos en papel transparente y la dejamos reposar 30 minutos en la nevera.
Ahora vamos a preparar la crema pastelera. Para ello, batimos 4 yemas de huevo con 125 g de azúcar y 50 g de maicena hasta conseguir una textura fluida.
Ahora ponemos 500 ml de leche junto a la ralladura de 1 lima a calentar en una olla. Cuando empiece a hervir, retiramos del fuego.
Vertemos un poco de la leche en la mezcla de las yemas y removemos inmediatamente y pasamos esta mezcla a la olla con el resto de la leche. Mezclamos bien, añadimos 1 cucharadita de esencia de vainilla y removemos a fuego bajo hasta que la crema pastelera espese. Una vez haya espesado, la dejamos enfriar cubierta con film.
Precalentamos el horno a 180 ºC. Engrasamos un molde de 28 cm de diámetro con mantequilla y lo espolvoreamos con harina de trigo. Estiramos la masa con un rodillo evitando manipularla mucho, ya que si se calienta será difícil de trabajar. Cuando ya tenga un tamaño superior al del molde, enrollamos la masa en un rodillo para pasarla al molde previamente engrasado.
Recortamos los bordes sobrantes y pinchamos la masa con un tenedor para que no suba. Opcionalmente, podemos cubrir la masa con papel vegetal y ponerle peso encima, por ejemplo, unas legumbres secas. Horneamos la masa así durante 15 minutos a 180 ºC. Pasado este tiempo, la sacamos del horno, retiramos el peso y dejamos enfriar la base.
Mientras la masa se enfría, lavamos y secamos 700 g de fresas. Les retiramos el pedúnculo y las cortamos por la mitad.
Ahora es el momento de montar la tarta. Para ello, extendemos la crema pastelera sobre la base con ayuda de una espátula o una cuchara, o bien, una manga pastelera, según preferencias.
A continuación, disponemos las fresas sobre toda la superficie de la crema.
Para terminar, diluimos 20 g de la mermelada de albaricoque con un poco de agua y, con ayuda de un pincel, pintamos las fresas con esta mezcla. Así la tarta tendrá un aspecto brillante que llamará aún más la atención. Y ya tenemos la tarta de fresas lista para servir.
Resumen fácil de preparación
- Mezclamos la harina de trigo con la mantequilla fría de la base
- Agregamos los ingredientes restantes de la base, amasamos y dejamos reposar la base en la nevera
- Mezclamos las yemas con el azúcar y la maicena de la crema pastelera
- Calentamos la leche con la ralladura de lima
- Vertemos un poco de la leche sobre las yemas, mezclamos y pasamos la mezcla al cazo, espesamos a fuego bajo y dejamos enfriar
- Estiramos la masa y la ponemos sobre un molde engrasado
- Horneamos la base a 180 ºC durante 15 minutos y la dejamos enfriar
- Lavamos, secamos y cortamos por la mitad las fresas
- Montamos la tarta extendiendo la crema pastelera sobre la base
- Cubrimos con las fresas
- Pincelamos la superficie de la tarta de fresas y crema con mermelada diluida en agua, y ya la podemos servir
