Esta es la receta tradicional gallega de las conocidas en su tierra como orellas de Entroido, una masa frita hecha con ingredientes básicos como harina de trigo, huevos, anís y una grasa como la manteca de vaca o mantequilla.
La leche y la levadura son dos ingredientes que dependen del cocinero que las elabore. Unas llevan leche, otras agua y otras no llevan ni una cosa ni la otra. En cuanto a la levadura, hay defensores y detractores.
Hay quien defiende que levadura con levadura no salen crujientes y otros que defienden su adicción para conseguir una masa más manejable. Personalmente, hice orejas con y sin levadura y puedo decir que, el hecho de que queden o no crujientes no depende de la levadura. El mejor truco para conseguir que queden crujientes es añadir al final manteca desmenuzada.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 30 minutos
- Tiempo de cocinado: 20 minutos
- Tiempo total: 50 minutos
- Raciones: 8
- Categoría: postre
- Tipo de cocina: gallega
- Calorías por ración (kcal): 245
Ingredientes de las orejas de Carnaval
Para la masa:
- 300 g de harina de trigo
- La ralladura de 1 limón
- 2 huevos
- 50 ml de licor de anís
- 1 pizca de sal
- 50 ml de agua
- 75 g de manteca cocida de vaca o mantequilla
Para la fritura:
- Aceite de girasol u oliva para freír
- 1 corteza de limón (opcional, para aromatizar el aceite)
- 1 anís estrellado (opcional, para aromatizar el aceite)
Para la decoración:
- Azúcar glas o corriente según gustos
Cómo hacer orejas de Carnaval
Preparamos los ingredientes y tamizamos 300 g de harina en un bol.
Rallamos 1 limón, añadimos 2 huevos, 50 ml de licor de anís, 50 ml de agua poco a poco y según la vaya admitiendo la masa, 1 pizca de sal y finalmente, 75 g de manteca cocida de vaca a temperatura ambiente o, en su defecto, la misma cantidad de mantequilla.
Mezclamos con las manos estos ingredientes y comenzamos a trabajar la masa.
Cuando esté lisa y elástica, la tapamos y la dejamos reposar en la nevera durante 1 hora aproximadamente.
Pasado el tiempo de reposo, empezamos a formar las orejas. Para ello, vamos tomando porciones de masa y las boleamos con las manos.
A continuación, estiramos bien las porciones de masa con un rodillo. No os preocupéis por la forma, las orejas son totalmente irregulares. Lo importante es que la masa quede fina. Es importante no poner harina en la mesa de trabajo. Si la masa se nos pega, engrasamos un poco el rodillo y la encimera, pero no usaremos harina.
Si cogemos más cantidad de masa nos saldrán orejas más grandes, aunque más difíciles de manejar en la fritura. a la hora de freírla. No obstante, y como todo, esto es cuestión de los gustos y costumbre de cada casa.
Una vez tenemos todas las orejas estiradas, ponemos una sartén al fuego con abundante aceite de girasol o de oliva suave. Opcionalmente, añadimos 1 corteza de limón y 1 anís estrellado para aromatizar el aceite. Cogemos las orejas con las manos y las llevamos a la sartén, aprovechando siempre este recorrido para estirarlas un poco más con las manos.
Freímos cada oreja de una a una en la sartén con cuidado y con 2 tenedores las arrugamos en el medio, para darle la forma de oreja y para que no se acumule en medio el aceite. Tardará unos segundos en dorarse por un lado. Una vez dorada la giramos y dejamos que se dore por el otro lado.
Una vez frita cada oreja, la escurrimos del aceite y la dejamos sobre papel absorbente. Luego la dejamos en una fuente. Repetimos con todas las orejas. Una vez fritas, las espolvoreamos con azúcar glas o azúcar corriente, según gustos y costumbres.
A continuación, ya las podemos degustar.
Resumen fácil de preparación
- Tamizamos la harina en un bol
- Añadimos el resto de ingredientes de la masa
- Mezclamos
- Dejamos reposar la masa
- Cortamos porciones
- Las estiramos con un rodillo
- Las podemos hacer más grandes o más pequeñas
- Calentamos el aceite y opcionalmente lo aromatizamos
- Freímos las orejas de una en una
- Las espolvoreamos con azúcar
- Servimos
