La masa de las flores de carnaval se hace a base de harina, huevos, leche y algún licor para darle un punto aromático al dulce. Se pueden hacer también con ralladura de limón, pero lo más común es utilizar anís y vainilla para darles ese toque tan peculiar.
Lo más característico de este dulce es el hierro con el que se les da forma a las flores al freírlas. Muchos dicen que recuerda a las cruces de la orden de Calatrava. Es importante comprar un buen hierro para hacer las flores. A la hora de freírlas, antes de meter el molde en la masa, se debe calentar bien el hierro para que la masa quede adherida. Después, se vuelve a meter en la sartén y ya se fríen las flores. Este punto es importante pues si se mete el hierro en la masa sin calentarlo en el aceite previamente la masa no se quedará en el hierro.
Para freír las flores es mejor utilizar un aceite de oliva suave o aceite de girasol ya que le aportará menos sabor a la masa y destacará más la vainilla y el licor.

Información de la receta
- Tiempo de preparación:10 minutos
- Tiempo de cocinado:20 minutos
- Tiempo total:30 minutos
- Raciones:10
- Categoría: postres
- Tipo de cocina: española
- Calorías por ración (kcal): 123
Ingredientes de las flores de carnaval para 10 personas
- 2 huevos
- 5 ml de esencia de vainilla
- 250 ml de leche
- 30 ml de licor de anís
- 180 g de harina de trigo repostería (w>200-250)
- 1 l de aceite de girasol u oliva suave (para freír)
- 100 g de azúcar blanca (para decorar)

Cómo hacer flores de carnaval
En un bol, se ponen los 2 huevos con 5 ml de esencia de vainilla y se baten con ayuda de unas varillas.

Se añaden los 250 ml de leche y los 30 ml de anís. Se bate de nuevo hasta que quede una mezcla homogénea.

Por último, se añaden los 180 g de harina de trigo de repostería. Se puede tamizar para que no queden grumos, aunque al batir la masa con las varillas se consigue que quede bien integrada. No hay que batir enérgicamente pues no interesa meter aire a la masa.

En un cazo hondo o una sartén lo suficientemente profunda, se pone 1 litro de aceite de oliva suave o de girasol para freír las flores. Se debe controlar que el aceite no se caliente en exceso. Si se dispone de un termómetro de cocina, se controlará que no sobrepase los 175 ºC.

Se mete el hierro para hacer las flores en el aceite caliente para que coja la temperatura. Después, se mete una vez caliente en la masa, hasta la mitad del hierro más o menos, y se vuelve a meter en el aceite para depositar la masa y hacer así las flores. La masa se suele despegar sola del hierro aunque, si no fuera así, se puede ayudar a despegarla de las juntas laterales del hierro, con una cuchara pequeña y con cuidado de no romper la flor. Se le da una vuelta en el aceite y se saca. Es un dulce muy fino por lo que hay tener cuidado al freírlo ya que, en cuestión de un minuto estará listo y si se deja demasiado podría dorarse en exceso.

Se saca la flor del aceite y se deja secar en papel absorbente de cocina para después pasarlo por el azúcar. Se repiten estos dos pasos con todas las flores, hasta terminar la masa.

Podemos acompañar nuestro té o café de media tarde con una flor de carnaval, un dulce exquisito.

Resumen fácil de preparación
- Batir los huevos con la esencia de vainilla
- Añadir la leche y el licor de anís
- Integrar la harina con ayuda de las varillas
- Poner aceite en un cazo o sartén a fuego medio alto hasta alcanzar los 170 ºC
- Calentar el hierro con el que se hacen las flores en el aceite, meterlo en la masa y freír las flores
- Secar las flores fritas con papel y pasar por azúcar
- Servir las flores acompañando el café o té