
La ensalada César es una de las más populares y no es de extrañar ya que su combinación de ingredientes, sabores y texturas con la irresistible cremosidad de la salsa César que la acompaña hacen de esta ensalada una delicia.
El origen de la ensalada César se sitúa en Tijuana, México, en 1924 y su creación suele atribuirse al dueño del local Caesar Cardini, del que tomó su nombre, un chef italiano que regentaba varios restaurantes en la zona. Se dice que esta popular ensalada se creó de forma improvisada un día en el que se agotaron varios ingredientes en el local y se hizo necesario recurrir a la improvisación.
La ensalada César original era mucho más sencilla que la famosa ensalada César con pollo que hoy conocemos. Sus ingredientes originales eran lechuga romana servida en hojas enteras, ajo, aceite de oliva, jugo de limón, salsa Worcestershire, queso parmesano y croutons. La salsa que aportaba la característica cremosidad de esta ensalada se hacía con huevo pasado por agua. Con el tiempo, la ensalada César fue evolucionando para incluir otros ingredientes como el pollo, el bacon, las anchoas, la mostaza y otros tipos de lechuga. La que presentamos en esta receta es una ensalada César sin pollo, inspirada en su versión original y acompañada con la salsa César más popular que suele hacerse con anchoas.
Esta receta se puede simplificar para hacer una versión rápida de la ensalada César. Para ello, un truco muy socorrido es partir de mayonesa comercial ya preparada para hacer la salsa César y simplemente mezclar unas 4 cucharadas de esta con 1 diente de ajo rallado, 2 cucharadas de zumo de limón, 1 cucharadita de mostaza, 2 cucharaditas de salsa Worcestershire y 3 cucharadas de queso parmesano rallado. Para una versión más ligera de esta salsa, se puede sustituir la mayonesa por yogur natural. Para montar esta ensalada César en versión simplificada, bastaría con extender en un plato unas hojas de lechuga o cogollo previamente lavadas y secadas, repartir unos croutons de pan por encima, añadir unas lascas de queso parmesano y cubrir la ensalada con esta salsa César recién preparada. Si la queréis con pollo, solo habría que incorporar este a la mezcla, ya sea en su versión con pollo crujiente siguiendo la receta de pechugas de pollo empanadas o simplemente optando por una pechuga de pollo cocida.
Como veis, la ensalada César da mucho juego y ya sea en su versión rápida o en la versión inspirada en la receta original que proponemos a continuación, siempre queda deliciosa. Además, esta popular elaboración nos puede solucionar un acompañamiento en su versión más sencilla sin pollo o incluso, una sabrosa cena rápida si la hacemos más completa con pollo.

Información de la receta
- Tiempo de preparación: 15 minutos
- Tiempo de cocinado: 5 minutos
- Tiempo total: 20 minutos
- Raciones: 2
- Categoría: entrante
- Tipo de cocina: internacional
- Calorías por ración (kcal): 636
Ingredientes de la ensalada César
Para la salsa César:
- 1 yema de huevo
- ½ cucharada de zumo de limón
- Sal
- 75 ml de aceite de oliva
- 1 diente de ajo
- 1 cucharada de vinagre
- 2 anchoas
- 1 cucharadita de mostaza de Dijon
- ½ cucharada de salsa Worcestershire
- 15 g de queso parmesano rallado
- Pimienta negra molida
Para la ensalada César:
- 2 rebanadas de pan
- 1 cucharada de aceite de oliva
- 1 cogollo de lechuga romana
- 15 g de queso parmesano en lascas o rallado

Cómo hacer la ensalada César
Comenzamos preparando la salsa César. Para ello, ponemos 1 yema de huevo en el vaso de la batidora, junto a ½ cucharada de zumo de limón y una pizca de sal.

Preparamos una mayonesa con la batidora, vertiendo poco a poco 75 ml de aceite de oliva y posicionando el brazo de la batidora en la base del vaso, iremos subiendo poco a poco a medida que la mayonesa emulsione.

Pelamos 1 diente de ajo y lo incorporamos a la mayonesa junto a 1 cucharada de vinagre, 2 anchoas, 1 cucharadita de mostaza y ½ cucharada de salsa Worcestershire. Rallamos 15 g de queso parmesano y lo añadimos también.

Obtendremos una crema homogénea. Salpimentamos al gusto y la reservamos en la nevera.

Para la ensalada César, pintamos 2 rebanadas de pan con 1 cucharada de aceite de oliva y lo freímos en una sartén caliente hasta que esté dorado.

Retiramos el pan de la sartén, dejamos enfriar ligeramente y lo cortamos en dados. Reservamos estos croutons de pan.

Lavamos y cortamos las hojas de 1 cogollo de lechuga romana. Las repartimos en un plato.

Repartimos por encima los dados de pan o picatostes y 15 g de queso parmesano en lascas o rallado.

Condimentamos la ensalada con la salsa César o la servimos aparte para que cada comensal se sirva al gusto. Esta ensalada, o mejor dicho su salsa, se debe consumir de inmediato sin conservar las sobras, por estar elaborada a base de huevo crudo.

Resumen fácil de preparación
- Hacemos la salsa César poniendo en el vaso de la batidora la yema, el zumo de limón y la sal
- Trituramos mientras vertemos el aceite poco a poco
- Incorporamos el ajo, el vinagre, las anchoas, la mostaza, la salsa Worcestershire y el parmesano
- Salpimentamos y reservamos
- Tostamos el pan
- Cortamos el pan en dados para obtener los croutons
- Repartimos el cogollo de lechuga en un plato
- Añadimos los croutons y el queso parmesano
- Repartimos la salsa por encima y servimos la ensalada César recién hecha






















