Los bollos patrios que pese a su nombre nada tienen que ver con Suiza

Textura interior aireada de los bollos suizos con azúcar cristalizado
Marina Corma
Pese a lo que pueda parecer por su nombre, estos bollitos son más españoles que la bandera. Nada tienen que ver con paraísos fiscales ni cuentas ocultas y esas cositas blancas por encima están tan buenas como te estás imaginando.
Por Héctor Hernández
16 de noviembre de 2023

¿A que tú también has sentido un flechazo al ver la foto de estos bollos? Por aquí no dejamos de imaginarnos los trozos mulliditos navegando en el café con leche… Pese a su nombre, nada tienen que ver con Suiza, sino más bien con un café madrileño donde se elaboraban e hicieron populares. Tanto como para pasar a la historia de los postres tradicionales españoles que no debes perderte por nada del mundo, porque la facilidad de hacerlos es comparable al inmenso placer que sentirás al comértelos.

Lo que ves son bollos suizos. Reciben ese nombre porque empezaron a prepararse en el café suizo, y vienen a ser unos tiernos bollitos de tipo brioche aunque con menos mantequilla que por encima llevan el toque infalible del ingrediente estrella de la repostería.

Suizos sí, pero de Madrid

El bollo suizo se elabora a base de harina de fuerza, leche, azúcar, mantequilla, un par de huevos, levadura, sal y agua, ingredientes que todos tenemos por casa y de fácil acceso. Lo que ves por encima es azúcar crujiente, muy fácil de hacer, muy decorativo y perfecto para dar el punto dulce.

Para hacerlos es necesario dejar levar la masa un par de veces, lo suyo es prepararlos con cierta antelación. Se pueden congelar y responden muy bien como te contamos en la receta competa de los bollos suizos disponibles aquí, por lo que puedes preparar bollos en masa y guardarlos para comer más adelante: son ideales en desayunos y meriendas donde durarán poco.

Bollos suizosMarina Corma

Receta de bollos suizos

Ingredientes

  • 190 g de harina de fuerza
  • 75 g de leche entera
  • 135 g de azúcar blanco (35 g para los bollos + 100 g para decorar)
  • 1 huevo M
  • Media cucharadita de sal
  • 5 g de levadura seca de panadero
  • 35 g de mantequilla sin sal
  • 1 huevo batido
  • Unas gotitas de agua

Paso a paso

  1. Mezcla en un bol de batidora 190 g de harina de fuerza, 75 g de leche entera, 35 g de azúcar blanco, 1 huevo M, media cucharadita de sal y 5 g de levadura de panadero.
  2. Con los ingredientes mezclados, añade 35 g de mantequilla sin sal. Amasa 20 minutos hasta que quede una masa lisa y elástica.
  3. Haz una bola con la masa, tápala y deja que doble su volumen.
  4. Desgasifica la masa en una superficie enharinada.
  5. Divide la masa en 6 porciones de 70 g. Bolea cada porción colócala en una bandeja de horno con papel vegetal.
  6. Cubre las masas y deja que doblen su volumen.
  7. Pincela con huevo batido cada bollo.
  8. Haz un corte en el centro de cada bollo con unas tijeras. Precalienta el horno con calor arriba y abajo a 180 ºC.
  9. Mezcla 100 g de azúcar blanco con unas gotitas de agua y pon un poco en la parte superior de cada bollo.
  10. Hornea los bollos 15 minutos o hasta que estén dorados.
  11. Saca los bollos del horno, déjalos enfriar y listos para comer.