Los buñuelos de viento son un clásico de la repostería casera tradicional española. En algunas comunidades existen variantes pero todos tienen como base la masa choux. Seguramente los hayamos visto preparar más de una vez en nuestras casas por nuestros mayores o los hayamos comprado en alguna pastelería pero nunca nos hayamos lanzado a prepararlos por nosotros mismos. Con esta receta sencilla ya no hay excusa para sorprender a nuestros seres queridos, amigos y comensales con unos deliciosos buñuelos de viento.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 15 minutos
- Tiempo de cocción: 30 minutos
- Tiempo total: 45 minutos
- Raciones: 4 (20-25 unidades)
- Categoría: repostería
- Tipo de cocina: española
- Calorías: 74 kcal por unidad
Ingredientes de los buñuelos de viento para 4 personas
- 2 huevos
- 75 g de harina
- 25 g de azúcar
- 25 g de mantequilla
- 100 ml de leche
- 50 ml de agua
- 1 cucharadita de sal
- 1 cucharadita de ron
- Piel de limón
- Canela (opcional)
- Aceite de girasol o de oliva 0,4 (para freír)
- Crema pastelera y crema pastelera con cacao para el relleno

Cómo hacer los buñuelos de viento
La receta de los buñuelos no es difícil, quizás lo más delicado es el momento de freírlos aunque con unos pequeños trucos lo tendremos solucionado.
La elaboración de la masa choux es una elaboración básica de repostería. Esta masa como sabemos es la misma que para hacer los profiteroles o los eclairs. La única diferencia con las otras masas es que los buñuelos se fríen y los profiteroles y eclairs se hornean.
Lo primero que tenemos que hacer es poner a calentar a fuego medio en un cazo la leche, el agua, la sal, la mantequilla, el azúcar, el ron y la piel del limón.

Cuando rompa a hervir lo separamos del fuego, retiramos la piel del limón y echamos de golpe la harina.

Lo removemos enérgicamente a fuego medio hasta que se separe la masa de las paredes.

Cuando la masa se separa de las paredes y tenemos una bola dejamos que temple y le añadimos un huevo. Removemos hasta que el huevo se integre perfectamente.

Si vemos que la masa necesita más huevo le añadimos medio huevo más batido. La consistencia de la masa ha de ser “de pico de pato”. Esto quiere decir que cuando la removamos y levantemos tenga caída pero quede parte en la pala o espátula.

Una vez tenemos la masa lista ponemos una sartén o cazo con fondo y una buena cantidad de aceite de girasol para freír. Nos ayudamos con un par de cucharas (las untamos en aceite) y hacemos con la masa pequeñas bolas. Cuando el aceite está caliente, aunque no demasiado (a unos 170ºC) ponemos unas 4 o 5 bolas para que se vayan friendo. Ellos mismo se irán dando vuelta para hacerse por los dos lados. Si no se dan vuelta solos los ayudamos con una cuchara o espumadera.

Cuando tenemos fritos los buñuelos los sacamos a un papel de cocina para quitar el exceso de aceite.

Los rebozamos en azúcar cuando aún están un poco calientes. Los dejamos enfriar y podemos rellenarlos de crema pastelera, de crema de chocolate, de nata, de mermelada… de lo que más nos guste.

Si no queremos rebozarlos en azúcar podemos espolvorear un poco de azúcar glas una vez rellenos.
Para presentarlos podemos ponerlos en una fuente todos juntos, en una bandeja, o en un plato individual variados a modo de degustación.

Resumen fácil de preparación
- Calentar el agua, la leche, la mantequilla, el ron, la sal, el azúcar e infusionamos la piel del limón hasta que hierva
- Cuando rompa a hervir se añade la harina de golpe y se trabaja hasta que la masa se separe de las paredes de la cazuela
- Cuando la masa esté lista se incorpora primero un huevo entero y después el segundo batido hasta conseguir textura de pico de pato
- En una sartén o cazo con fondo ponemos bastante aceite de girasol y calentamos para freír los buñuelos
- Hacemos pequeñas bolas ayudándonos de dos cucharas y freímos
- Sacamos los buñuelos a un papel de cocina para que sequen el exceso de aceite y pasamos por azúcar aún calientes
- Dejamos enfriar y rellenamos al gusto
- Presentamos y servimos para degustarlos