Las ensaladas son uno de los platos más recurridos en el mundo de la cocina. Además de estar llenas de nutrientes, son todo un espectáculo de colores para los ojos. Y ni qué decir tiene lo fácil que son de preparar. No hace falta ser un cocinillas ni meterte horas entre los fogones, en menos de 5 minutos tienes lista una deliciosa ensalada nutritiva.
Otro punto muy positivo es que se consumen en cualquier mes del año, da igual si es invierno o verano, siempre sientan bien. Además, no hay una receta cerrada para las ensaladas, puedes elaborarlas como más te gusten: tomate, maíz, pollo, atún, cebolla, frutos secos... En el mundo de las ensaladas no hay límites para la imaginación, aunque si la base es lechuga, mejor. Y, hablando de lechugas, ¿cuántas veces se te ha puesto pocha al par de días de comprarla? Con estos trucos, adiós lechuga pocha.
Trucos para conservar la lechuga fresca
Por muy verde que compres la lechuga, nadie te puede asegurar que esa frescura del primer día le vaya a durar mucho tiempo, pero si sigues estos trucos, muy probablemente puedas alargar su vida algunos días más. Toma nota:
- Una vez hayas comprado la lechuga, es importante que la metas dentro de una bolsa de plástico perforada, para que el aire circule, y la guardes dentro del cajón de las verduras de la nevera. Así evitarás que le entre humedad.
- Aparte de la bolsa perforada, otra opción para almacenarla en buenas condiciones es usando recipientes herméticos. Al mantener la humedad bajo control, prolongan su frescura por más tiempo. Además, evitan que la lechuga absorba otros olores de la nevera.
- Cada vez que vayas a consumirla, asegúrate de secarla con cuidado antes de volver a meterla en el frigorífico ya que los restos de agua podría estropearla. Puedes ayudarte de papel de cocina para su secado.
- Otro consejo útil para mantener tu lechuga fresca por más tiempo es no guardarla cortada. Es decir, es mejor que la guardes manteniendo sus hojas enteras ya que, si están cortadas, pueden descomponerse muy rápidamente al tener mucha superficie expuesta al aire.
- Por supuesto, lo de congelar la lechuga debes dejarlo fuera de tus planes. Es una verdura con un alto contenido en agua y, si se congela, su textura cambiará por completo.
No podemos asegurarte un éxito rotundo y que tu lechuga te dure días intacta, con buen color y sin estropearse, pero seguro que con estos cinco trucos algún día más que otro sí que te durará.
