Si eres amante del vino te habrás planteado alguna vez hacer una cata o quizá tus amigos hayan decidido organizar una en casa. Sea como sea, tanto formal como informal, lo cierto es que son muchos los pequeños detalles a los que hay que atender cuando se hace una cata y que pueden hacer que cambie mucho el resultado de la misma.
Cuando no se es experto en vino, es fácil caer en algunos errores a la hora de catarlos. Cómo evitar que se modifiquen los olores y sabores del producto, además de la temperatura, son algunos de los aspectos más importantes que tener en cuenta, pero no los únicos.
Errores más comunes a evitar en una cata de vino
Aquí os contamos cómo sortear algunos errores de manera sencilla en una cata.
Coger la copa incorrectamente
Las copas de vino se han de coger por el tallo, ya que la parte de arriba, el cáliz, está en contacto con el vino, y podemos calentarlo a través del cristal con las manos, alterando su aroma y su sabor por el aumento de temperatura. Agarrarla por el pie no es un error, pero es más incómodo y difícil de controlar.
Beber café, fumar o usar perfume
Para poder poner todos los sentidos posibles en una cata se ha de evitar todo aquello que puede alterarlos. Para paladear los matices del vino se han de dejar de lado el café o el tabaco al menos dos horas antes de la cata. Por otro lado, los perfumes modifican los olores y confunden los sentidos, que necesitan de un ambiente neutro.
Damián SerranoIr en ayunas
Aunque en muchas catas ofrecen algo para picar, como pan, embutido o queso, es importante saber que esto no es suficiente para proteger un estómago vacío durante la ingesta de alcohol. Por ello, lo ideal es haber ingerido algo antes de la cata. Un buen tentempié (si es una comida o cena, mejor que mejor) ayudará a que el vino no acabe jugando una mala pasada.
No usar la escupidera
Es cierto que no es del todo un error, y que mucha gente bebe toda su copa en las catas, pero si estas son largas, las copas están muy llenas o hay una gran cantidad de estas, quizá sea mejor vaciar un poco su contenido en la escupidera para no tener que apurar cada una de ellas, sin temor a que esté mal visto.
No prestar atención al color, sabor y olor del vino
Una cata no es una excusa para ir a tomarse un vino. La idea es que los conocimientos que adquieras te sirvan para escoger mejor un vino ya sea en un restaurante o en una tienda. De esta forma sabrás qué variedades te gustan más, con qué acompañar el vino y saber cuándo está en buenas condiciones, tanto de temperatura como de sabor.