Pocos pueden resistirse a unas fresas con nata para el postre, uno de nuestros favoritos cuando de esta fruta se trata. Y es que en primavera, cuando está en su mejor momento, puede prepararse en una gran variedad de recetas, desde granizados hasta tartas, mousse e incluso en forma de gazpacho de fresas.
Antes de consumir cualquier fruta fresca, incluidas las fresas, es fundamental lavarla correctamente, más aun si no vas a pelarlas antes de comerlas. Como muchas otras frutas, las fresas pueden absorber fácilmente los pesticidas. Por eso nada más llegar de la frutería o el supermercado es fundamental lavar las frutas antes de guardarlas, así estarán listas cuando vayas a echar mano de ellas.
¿Cómo lavar las fresas correctamente?
Aunque hasta ahora hayas optado por lavarlas simplemente con agua bajo el grifo, te proponemos una nueva manera de lavar las fresas para que puedas comerlas de forma segura o utilizarlas en cualquiera de las recetas con fresas que pueden hacerse. La mejor manera de lavar las fresas es preparando una solución líquida que incluya un componente antibacteriano y que además no sea perjudicial para la salud.
Combinando agua y vinagre de manzana, tendremos lista la mejor solución para lavar las fresas, ya que el vinagre es un desinfectante natural y además no aportará nada de sabor a la fruta. La manera de hacerlo es mezclando 3 tazas de agua con una de vinagre en un recipiente para dejar las fresas en remojo al menos 15 minutos. Pasado el tiempo, sólo tendrás que escurrirlas y enjuagarlas bajo el grifo.
Una vez lavadas, es fundamental dejarlas secar del todo antes de guardarlas en el cajón de las frutas dentro de la nevera. De lo contrario, podrían enmohecerse por el exceso de humedad.