El proceso de elaboración de esta receta es muy fácil. Con unos ingredientes muy sencillos, este pollo con salsa de tomate se preparará casi solo. En resultado es un plato con todo el sabor de la mejor cocina casera; un delicioso pollo con tomate de la abuela.
Para su elaboración, es importante emplear una parte del pollo jugosa y sabrosa, y optar por unos tomates buenos de una variedad dulce. Podemos hacer la receta con tomate natural o con tomates en conserva. En este último caso, siempre es mejor optar por los tomates enteros ya pelados.
Aunque en esta receta hemos optado por no usar ninguna bebida en la salsa, podéis añadir vino o brandi en el momento que añadimos el tomate, para aportar un punto diferente de sabor a la salsa.
Con estas pequeñas premisas, a continuación os contamos cómo preparar un pollo con tomate casero, bien sabroso y facilito estupendo para incluir en vuestros menús semanales
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 15 minutos
- Tiempo de cocinado: 25 minutos
- Tiempo total: 40 minutos
- Raciones: 4
- Categoría: plato principal
- Tipo de cocina: española
- Calorías por ración (kcal): 1011
Ingredientes del pollo con tomate para 4 personas
- 1,5 kg de pollo troceado (4 cuartos traseros troceados)
- Sal
- 1 cebolla mediana
- 3 dientes de ajo
- 750 g de tomate pera entero pelado (natural o en conserva)
- 150 ml de aceite de oliva suave
- 300 ml de caldo de pollo
- 2 hojas de laurel
- 1 manojo de hierbas aromáticas frescas para decorar (perejil, tomillo y romero)
Cómo hacer pollo con tomate
Para empezar, retiramos la piel a 1,5 kg de pollo troceado y le añadimos 1 cucharilla de sal. A continuación, pelamos y picamos 1 cebolla bien finita y laminamos 3 dientes de ajo.
Después, trituramos el tomate. En nuestro caso, hemos optado por tomate en conserva. Echamos 750 g de tomates ya pelados y enteros en el vaso de la batidora y los trituramos hasta tener una salsa.
Una vez tenemos la salsa lista, la pasamos a un recipiente y la reservamos.
Aparte, en una olla o cazuela de base amplia, echamos 150 ml de aceite de oliva suave y cuando esté caliente, vamos echando el pollo que tenemos reservado y lo doramos por ambos lados.
No queremos cocinarlo, simplemente sellarlo. Después de dorarlo un par de minutos por cada lado lo retiramos para un plato y lo reservamos.
Una vez tenemos el pollo sellado, dejamos que el aceite que queda en la cazuela se caliente un poco y doramos el ajo picado. A continuación, añadimos la cebolla, dejamos que se poche unos minutos y cuando esté transparente, añadimos el tomate triturado. Si quisiéramos añadir algún vino o licor, este sería el momento.
Removemos todo, dejamos que se cocine unos minutos y añadimos 300 ml de caldo de pollo que tendremos caliente.
Dejamos que la salsa se concentre unos minutos y finalmente añadimos el pollo que teníamos reservado. Lo vamos colocando en la cazuela de forma que no queden los trozos superpuestos, para que su cocción sea uniforme.
Tapamos la cazuela y esperamos que el conjunto hierva de nuevo. En este punto, probamos la salsa y rectificamos la sal si fuera necesario. Añadimos 2 hojas de laurel y dejamos que se cocine a fuego medio durante media hora. Durante la cocción, si vemos que se queda muy seco, o si queremos una salsa más líquida y ligera, podemos añadir más caldo.
Pasada la media hora de cocción, verificamos que la carne esté cocida; si se pincha fácilmente, apartamos la olla del fuego. Espolvoreamos por encima unas hierbas aromáticas frescas picadas, para decorar y darle un toque de color y un aroma fresco al plato.
Con esto, ya lo tenemos listo. Llevamos el pollo a la mesa en la propia cazuela para que se mantenga caliente y poder añadir así salsa al gusto en cada plato.
Podemos acompañarlo de una guarnición al gusto: pasta, verduras al horno, patatas fritas o un arroz blanco.
Resumen fácil de preparación
- Retiramos la piel del pollo y cortamos la cebolla y el ajo
- Trituramos los tomates
- Reservamos la salsa en un recipiente
- Doramos el pollo
- Lo retiramos para un plato y lo reservamos
- Doramos el ajo en la misma cazuela, pochamos la cebolla y añadimos el tomate
- Echamos el caldo de pollo y dejamos reducir
- Reincorporamos el pollo
- Añadimos el laurel y dejamos cocer media hora tapado. Rectificamos de sal si fuera necesario
- Una vez el pollo esté cocido, le añadimos las hierbas aromáticas picadas
- Lo llevamos a la mesa en la propia cazuela
- Acompañamos de una guarnición al gusto
