Este fondo claro o fondo blanco se puede utilizar simplemente como base para una reconfortante sopa, aunque la verdad es que puede realzar sustancialmente guisos, estofados, salsas o arroces. Sustituyendo el agua por fondo de pollo conseguirás sabores mucho más intensos en tus platos.
Lo mejor es que se prepara con ingredientes muy económicos y, además, se hace prácticamente solo. Eso sí, hay que darle el tiempo necesario (unas dos horas de cocción) para que concentre bien todos los matices del pollo y las verduras que vamos a utilizar.
Una vez hecho, aguantará unos 3 días en la nevera, así que, si no lo vas a consumir en ese tiempo, te recomendamos que lo congeles en porciones para poder ir utilizándolo según lo necesites.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 5 minutos
- Tiempo de cocinado: 2 horas y 10 minutos
- Tiempo total: 2 horas y 15 minutos (más unas 8 horas de enfriado)
- Raciones: 4, 1 litro
- Categoría: receta base
- Tipo de cocina: española
- Calorías por ración (kcal): 18
Ingredientes del fondo de pollo
- 1 kg de carcasas de pollo
- 1 puerro
- Media cebolla
- 2 zanahorias
- 1 nabo
- 2 hojas de laurel
- 1 ramita de perejil
- 1 ramita de romero
- 1 ramita de tomillo
- 3 litros de agua
Cómo hacer fondo de pollo
En primer lugar, ponemos 1 kg de carcasas de pollo en una olla con agua fría, para proceder a blanquearlas.
Para ello, ponemos la olla al fuego, subimos el fuego al máximo y al llegar a ebullición, sacamos las carcasas del agua y las lavamos. Descartamos el agua de esta cocción.
Mientras tanto, lavamos, pelamos y cortamos en trozos grandes 1 puerro (la parte blanca), media cebolla o 1 cebolla pequeña, 2 zanahorias y 1 nabo.
Ponemos las carcasas de pollo y las verduras cortadas en una olla o cazuela grande y añadimos 3 litros de agua fría, 2 hojas de laurel, 1 ramita de perejil, 1 ramita de romero y 1 ramita de tomillo.
Cocemos a fuego suave durante 1 hora, sin dejar que hierva a borbotones. Durante este tiempo, iremos retirando con una cuchara las impurezas que suben a la superficie en forma de espuma.
Pasado el tiempo de cocción, colamos el fondo de pollo con un colador de malla fina o con una estameña.
Una vez colado, y cuando ya se haya enfriado, lo llevamos a la nevera durante unas 8 horas.
Transcurrido el tiempo de reposo en la nevera, la grasa se habrá solidificado en la parte superior, formando una especie de pasta blanquecina que retiraremos fácilmente con una cuchara.
Después, volveremos a cocer el caldo obtenido durante 1 hora para concentrar los sabores, dejando que reduzca a fuego suave. Lo colamos de nuevo con un colador de malla fina o con una estameña.
Podremos comprobar cómo el líquido ha reducido de forma notable obteniendo, tras esta segunda cocción, aproximadamente 1 litro de fondo algo más oscuro y concentrado.
En este momento ya tendríamos nuestro fondo de pollo listo para utilizarlo en la preparación que deseemos.
Resumen fácil de preparación
- Ponemos las carcasas de pollo en una olla con agua fría
- Les damos un hervor, las sacamos del agua, la cual desecharemos, y las lavamos
- Cortamos en trozos grandes las hortalizas
- Ponemos todos los ingredientes en una olla
- Cocemos a fuego suave durante 1 hora y retiramos la espuma de la superficie
- Colamos el fondo
- Lo dejamos enfriar en la nevera unas 8 horas
- Lo desgrasamos con una cuchara
- Lo cocemos de nuevo durante 1 hora y lo colamos
- Tras esta cocción, el fondo se habrá reducido y concentrado
- Lo usamos a conveniencia
