Si hasta ahora solo consumías la espinaca cocinada, ¡tienes que probarla en crudo! En casa nos encanta utilizar esta verdura como base de un sinfín de ensaladas frescas, en la mayoría de casos, sencillas y sin demasiados ingredientes. Eso sí, acompañarla de una buena vinagreta de mostaza y miel siempre es un acierto, porque le aporta un contraste ácido y dulce que nos encanta. ¡Vamos con la receta!
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 15 minutos
- Tiempo total: 15 minutos
- Raciones: 2
- Categoría: entrante, primer plato o plato principal
- Tipo de cocina: mediterránea, vegetariana
- Calorías: 210 kcal por ración
Ingredientes de la ensalada de espinacas para 2 personas
- 200 g de espinacas baby frescas
- 2 champiñones grandes o 3 pequeños
- Un puñado de nueces
- Un puñado de pipas de girasol al natural
- Un puñado de pasas sultanas
- 30 g de queso semicurado de cabra (en taco)
Para la vinagreta:
- 8 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 2 cucharadas de mostaza de Dijon
- 3 cucharadas de miel
- Zumo de 1/2 limón
- 1 cucharada de vinagre de manzana
- 1 cucharadita rasa de sal
- Una pizca de pimienta negra molida
Cómo hacer la ensalada de espinacas
El primer paso para elaborar nuestra ensalada será limpiar bien los dos ingredientes principales: las espinacas y los champiñones. En el caso de las espinacas, hoy en día es posible encontrar bolsas en las que la verdura ya está lista para consumir, sin necesidad de lavarla. De lo contrario, sí es importante que la laves bien para eliminar cualquier impureza, tierra o suciedad que pueda tener. Este paso es fundamental, no solo en ésta, sino en todas las ensaladas con hojas frescas que vayas a prepararte.
Limpiamos también los champiñones, pasándoles un papel o paño humedecido, pero nunca enjuagándolos con abundante agua. Es el momento de preparar el aliño de nuestra ensalada: la vinagreta de miel y mostaza. Para ello, simplemente mezclamos en un bol todos los ingredientes (el AOVE, la miel, la mostaza, el vinagre de manzana, el zumo de medio limón, la sal y la pimienta negra) y batimos bien con unas varillas hasta obtener una salsa bien emulsionada y ligera. Con las cantidades indicadas más arriba, queda una vinagreta de sabor suave, ¡recuerda probarla y ajustar a tu gusto!
A continuación, cortamos los champiñones en láminas, y el queso en pequeños dados. En mi caso, he elegido queso de cabra semicurado ya que no me gustan los quesos de sabores muy intensos, pero puedes elegir el queso que más te guste, como el feta o uno de oveja, viejo o curado.
Solo nos falta montar la ensalada. Para ello, colocamos en el plato una cama con las espinacas baby. Encima, añadimos los champiñones, el queso, las nueces, las pipas de girasol y las pasas sultanas. Para rematar, aliñamos con la vinagreta de miel y mostaza que hemos preparado y le damos un toque de sal y pimienta extra. ¡Y ya estaría lista para disfrutar!
Lo mejor de esta receta es que admite infinitas variaciones, por lo que puedes customizarla a tu gusto utilizando otros frutos secos (queda genial con anacardos o almendras), otro tipo de queso (el contraste del feta, por ejemplo, también queda delicioso con la vinagreta), incluso añadiendo picatostes, o arándanos deshidratados.
Eso sí, para nosotros hay dos ingredientes en esta ensalada que no son negociables: la espinaca y el champiñón. ¡Combinación ganadora para una ensalada saciante, nutritiva y con un delicioso toque gourmand!
Resumen fácil de preparación
- Lavar bien las espinacas baby y los champiñones
- Preparar la vinagreta de miel y mostaza
- Laminar los champiñones y cortar el queso a dados
- Montar la ensalada: primero las espinacas, y encima, el resto de ingredientes: champiñones, queso y frutos secos
- Aliñar con la vinagreta de miel y mostaza, salpimentando de nuevo
- Servir como entrante, primer plato o principal. ¡Disfrutar!
