A todo el mundo le gustan las croquetas, ¿verdad? Podríamos decir que es tan cierto como que el sol sale todos los días. Además, contando con que se pueden hacer infinitas variedades, cada persona tiene su tipo de croqueta favorita: croquetas de jamón, de pollo, de puchero… ¿Y por qué no? Estas croquetas de champiñones, que estamos seguros no te van a dejar indiferente.
Antes de contarte cómo prepararlas, queremos recalcar que preparar croquetas en casa es bastante fácil y sencillo. Quizá hayas escuchado por ahí que preparar croquetas es un rollo, que se tarda mucho, que se ensucia todo… Pues vamos a desmentir todo eso. Bueno, casi todo. El tiempo no lo podemos comprimir ya que la masa de las croquetas necesita reposo. Pero el resto, ya verás que es pan comido.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 30 minutos
- Tiempo de cocción: 30 minutos
- Tiempo total: 4 horas
- Raciones: 4
- Categoría: entrante
- Tipo de cocina: española
- Calorías: 165 kcal por cada 100 g
Ingredientes de las croquetas de champiñones para 4 personas
- 250 g de champiñones
Para la bechamel:
- 500 ml de leche entera (muy fría, de la nevera)
- 45 g de harina de trigo
- 20 g de mantequilla
- 25 g de aceite de oliva
- 1 cebolleta pequeña (o ½ cebolla grande)
- Nuez moscada
- Pimienta negra molida
- Sal
Para el empanado:
- 1 huevo campero
- Pan rallado
- Aceite de girasol para freír
Cómo hacer croquetas de champiñones
Lo primero de todo, revisar los champiñones y quitarles los restos de suciedad bien frotando con un paño húmedo o dándoles un enjuague rápido bajo el grifo de agua. Cortarles la parte seca del tallo y picarlos muy fino, bien a cuchillo o con un accesorio picador. A nosotros nos gusta esta segunda opción.
En un cazo grande a fuego medio poner a calentar el aceite de oliva junto con la mantequilla y cuando ésta se derrita, añadir la cebolleta picada. Sofreír durante unos 6 o 7 minutos hasta que la cebolleta esté tierna y se vuelva translúcida.
Añadir los champiñones picados y rehogar unos 5 o 6 minutos, hasta que hayan soltado el agua y se hayan secado.
Espolvorear la harina, mezclar bien y cocerla unos 2 minutos para que pierda el sabor a crudo.
Retirar el cazo del fuego e inmediatamente incorporar la leche recién sacada de la nevera. Batir enérgicamente con unas varillas hasta que la harina se haya disuelto. El choque térmico entre la harina caliente y la leche fría facilita que ambos ingredientes se integren sin dejar grumos. Volver a poner el cazo al fuego fuerte y calentar removiendo hasta que empiece a hervir. Luego, bajar el fuego a medio-bajo y dejar que cueza unos 10 minutos. No olvidar remover con frecuencia para que no se queme.
Salpimentar al gusto y condimentar generosamente con nuez moscada. Transferir a una fuente y pintar la superficie con aceite para evitar que se forme costra. Tapar y dejar reposar en la nevera un mínimo de 3 horas, el tiempo suficiente para que la bechamel se haya endurecido. También se puede dejar de un día para otro.
Dividir la masa en 16 rectángulos más o menos iguales y dar forma de croqueta a cada uno. Se le puede dar forma alargada o redonda, como se prefiera. Si se hace con las manos, es conveniente engrasarlas ligeramente con un poco de aceite para que la masa no se pegue. También se pueden bolear ayudándonos con dos cucharas.
Una vez formadas las croquetas, pasarlas por huevo batido e inmediatamente después cubrirlas con pan rallado. Prestar especial atención a que cada croqueta quede bien cubierta de pan rallado, que no haya huecos, para que luego se puedan freír correctamente.
Freír por tandas en abundante aceite caliente hasta que estén doradas al gusto. No sobrecargar la fritura para que tarden menos en dorarse, ya que si se echan muchas croquetas a la vez tardarán más y absorberán más cantidad de aceite. Conforme se sacan de la fritura, se van dejando reposar sobre papel absorbente para recoger el exceso de aceite.
Resumen fácil de preparación
- Limpiar y picar los champiñones
- En un cazo, pochar la cebolla con el aceite y la mantequilla
- Añadir los champiñones y rehogar hasta que se hayan secado
- Espolvorear la harina y cocerla un par de minutos
- Retirar el cazo del fuego e incorporar la leche fría batiendo enérgicamente con las varillas
- Volver a calentar y, cuando empiece a hervir, dejar cocer 10 minutos a fuego medio-bajo. Remover con frecuencia
- Salpimentar y condimentar con nuez moscada. Transferir a una fuente y pintar con aceite la superficie. Reposar 3 horas o de un día para otro
- Dividir la masa en 16 rectángulos y darles forma de croqueta
- Pasar las croquetas por huevo batido y luego empanarlas bien sin que queden huecos
- Freír por tandas en abundante aceite caliente. Reposar sobre papel absorbente
