Asomado al Atlántico, el océano que tanto lo inspira, y asentado sobre el paseo marítimo de A Coruña, la tierra que por completo lo domina, el restaurante Alborada hace suya la cultura gastronómica gallega añadiendo creatividad, elaboraciones ejecutadas con precisión y nuevas técnicas culinarias. Una innegable cocina atlántica, hecha con los mejores productos del mar y de la tierra, en una constante evolución.
Lejos queda el nacimiento del espacio gastronómico hace más de una década. Como un proyecto familiar con grandes aspiraciones, centrado en respetar los orígenes ensalzando el mejor producto propio aprovechando la innovación de estos tiempos.

Tras años de consolidación y trabajo por desarrollar esa cocina que los hizo únicos y les valió la primera estrella Michelin conseguida en 2011, comienza un amplio proceso de expansión y renovación en el que el chef Iván Domínguez entra a formar parte como responsable de cocina. Compartir una pasión desmedida por la mejor materia prima gallega, el equilibrio y la elegancia, junto con el interés por lo asiático y nórdico del cocinero coruñés, hacen de la unión el éxito presente de Alborada y el grupo Amicalia.
En el restaurante se observa una cocina consistente que refleja el entorno y, al mismo tiempo, conecta allende los mares con atributos propios de la culinaria común de la Europa del Norte; algo poco visto en la cocina española. Encontrando, por encima de todo, ese discurso tan propio e inequívoco del cocinero que ha conseguido convertir en inconfundibles los proyectos de los que es partícipe.

Es un dominio exquisito —con técnicas sencillas— de pescados habitualmente tildados de humildes, como el cabracho, la raya, la palometa negra o el pez ballesta. Adquiridos diariamente en la lonja de la ciudad, siempre buscando su mejor momento, y que trata haciendo uso de agua de mar previamente filtrada, indispensable en sus quehaceres. Ahí están su bonito de Burela, el sargo al vapor, judías del país y caldo limpio de sus espinas o la vieira gallega a la sal de ramallo de mar, raíz de capuccina y hierbas del litoral.

Un idéntico poderío el mostrado a la hora de trataraquello que surge de la tierra y, por ende, de las granjas. Como esa recuperación que ha hecho del galo celta, como ese plato de judías de la horta de Antía, el lomo de ternera gallega risolado que ofrece con trigo verde y salsa poivrade o la sencilla elaboración que lleva a cabo con el cochinillo celta.
Restaurante Alborada
Paseo marítimo Alcalde Francisco Vázquez, 2515002 A Coruña
981929201
www.restaurante-alborada.com
Atlántica
50€-80€