Emplazado en un privilegiado paraje natural de la Sierra de Albarracín, en la localidad turolense de Tramacastilla, junto al río Guadalaviar, el restaurante-hospedería El Batán apuesta por brindar un alojamiento donde reina la tranquilidad y una cocina en la que importan, sobre todo, las raíces. María José Meda y Sebastián Roselló, la pareja de propietarios, se afanan en demostrar cómo aprecian las cosas bien hechas.
Un antiguo lavadero de lanas, de ahí el nombre del establecimiento, toda una muestra de la arquitectura tradicional de la zona, es el perfecto empaque de lo que acontece dentro. Por un lado las contadas habitaciones de la hospedería, repletas de encanto, verdadero oasis de paz, y por otro la sala del restaurante. Acogedora, muy cuidada y especialmente cálida, con un estilo rústico evolucionado que le sienta fenomenal.

Acomodados en una de sus mesas, llega el momento de enfrentarse a las diferentes opciones que nos proponen desde la cocina de la casa. Basadas en esa estima que se profesa a la materia prima local, al recetario propio, a los sabores que en la sierra turolense se tienen instalados en la memoria. Y que, sin embargo, no renuncian a dosis de creatividad que sobresalen de lo tradicional, a nuevas técnicas, a ingredientes de otras partes que pueden ayudar a ensalzar el género propio.
Normalmente, en El Batán encontraremos tres modos de vivir la experiencia gustativa: la carta y dos menús degustación, el menú Gourmet y el Gourmand. El primero de ellos es una propuesta puesta al día, la vertiente más personal, creativa y contemporánea con los últimos platos creados en el restaurante. El segundo, el menú degustación con los platos más tradicionales, aquellas elaboraciones convertidas en clásicas y que los clientes más habituales piden y vuelven a pedir en sus visitas, rogando que continúen.

Destacan preparaciones como el arroz bomba con perdiz y boletus edulis; el lomo de atún rojo Balfegó con sésamo, guacamole, wasabi y boniato; el ceviche de perrochicos y lubina, vegetales de Aragón y leche de tigre; la media paletilla de ternasco de Aragón al horno con patatas a la panadera o el cochinillo del Jiloca, puré trufado y confitura de cebolla roja. Platos que recogen la tradición y la conjugan con influencias de otros lugares. Combinaciones variopintas en las que se aprecia un contacto directo con el entorno y un trufado manifiesto de contemporaneidad.
El restaurante El Batán se convirtió en 2013 en el primer establecimiento hostelero de la provincia de Teruel con una estrella Michelin, otorgada de cara a la edición 2014 de la referente guía gastronómica. Un astro que, a día de hoy, lucen junto a un sol de la guía Repsol.
El Batán
Hospedería-restauranteCarretera comarcal 1512, kilómetro 4344112 Tramacastilla (Teruel)
978706070
www.elbatan.es
Aragonesa
43€-56€