
El queso brie es uno de los quesos franceses más conocidos. Es originario de la región de Brie y se elabora con leche cruda de vaca. El brie es un queso de pasta blanda que se caracteriza por su textura cremosa al igual que el camembert, aunque su sabor es más suave, de modo que combina a la perfección con todo tipo de ingredientes. La corteza blanca del queso brie es comestible lo que facilita su consumo y su integración en todo tipo de recetas y elaboraciones.
Para disfrutar de toda la suavidad y sabor del queso brie, basta con cortarlo en lonchas o dados y consumirlo tal cual, sobre unas tostadas o como relleno de deliciosos bocadillos. El queso brie también se puede cocinar para disfrutarlo calentito y con su interior fundente, lo que lo convierte en una delicia. Para ello se puede hacer a la plancha durante unos minutos por ambos lados en una sartén ligeramente engrasada a fuego medio-bajo. También se puede asar de forma idéntica a como preparamos el queso camembert al horno o incluso se puede freír en una sartén, que es como lo hemos preparado en esta ocasión. De esta forma queda delicioso ya que su interior fundente contrasta con la corteza rebozada crujiente y además, lo tendremos listo en solo unos minutos.
Para hacer esta receta de queso brie rebozado y frito, hemos utilizado una cuña de queso como las que se venden en los supermercados, aunque también podríamos trocearlo y cocinarlo del mismo modo en porciones más pequeñas para servirlo en dados o triángulos más pequeños. Para freír el queso brie, primero tenemos que rebozarlo con harina, para que el huevo se pegue, y a continuación pasarlo por huevo batido y por pan rallado. Al dorarlo de esta manera en la sartén a fuego alto, conseguimos que el interior se funda a la perfección pero la corteza quede intacta hasta servirlo a la mesa.
Una vez frito, podemos servir el queso brie rebozado tal cual o acompañado con mermelada de pimiento o mermelada de tomate o incluso otra al gusto. También queda muy rico con un chorrito de miel. Con sabores más acentuados como la salsa agridulce o el chimichurri funciona también estupendamente. A la hora de degustarlo, solo hay que tener en cuenta servirlo inmediatamente, aunque para prepararlo con antelación, podemos dejarlo ya rebozado y listo para freír en la nevera, y así solo necesitamos un par de minutos para dorarlo en la sartén.

Información de la receta
- Tiempo de preparación: 5 minutos
- Tiempo de cocinado: 5 minutos
- Tiempo total: 10 minutos
- Raciones: 2
- Categoría: entrante
- Tipo de cocina: internacional
- Calorías por ración (kcal): 378
Ingredientes del queso brie rebozado
- 1 cuña de queso brie
- 1 cucharada de harina de trigo
- 1 huevo
- 3 cucharadas de pan rallado
- 2 cucharadas de aceite para freír

Cómo hacer queso brie rebozado
En primer lugar, rebozamos 1 cuña de queso brie con 1 cucharada de harina de trigo por todos los lados. Si vuestra cuña de queso está completamente cubierta por la corteza blanca, este paso no sería necesario, aunque si troceáis el queso o sus laterales carecen de corteza, es necesario rebozarlo en harina para que el huevo se adhiera bien y evitar así que el queso se salga durante la fritura.

Batimos 1 huevo en un plato y pasamos el queso brie enharinado por este, cubriéndolo bien con el huevo batido por todos sus lados.

Rebozamos el queso brie con 3 cucharadas de pan rallado.

Calentamos 2 cucharadas de aceite de oliva en una sartén de un tamaño apropiado para poder freír bien nuestro queso y doramos el queso rebozado por todos los lados a fuego medio-alto hasta que esté completamente dorado. Una vez dorado al gusto, escurrimos bien el exceso de aceite y servimos el queso brie rebozado recién hecho.

Resumen fácil de preparación
- Rebozamos el queso brie con harina
- Lo pasamos por el huevo batido
- Lo rebozamos a continuación con pan rallado
- Freímos el queso brie rebozado en una sartén con aceite y lo servimos recién hecho


















