La tiropita tiene sus raíces en la cocina griega y mediterránea. Su nombre griego significa «pastel de queso». Se cree que sus orígenes se remontan a la época del Imperio Bizantino, cuando ya existían preparaciones similares con masa y queso de la región. A lo largo de los siglos, esta elaboración ha evolucionado y se ha convertido en una parte esencial de la gastronomía griega. Hoy en día se encuentra en distintas formas y tamaños, desde empanadas individuales hasta grandes bandejas horneadas que se cortan en porciones.
La receta tradicional de la tiropita se elabora con ingredientes básicos, aunque con un resultado espectacular. Los más utilizados son la masa filo, que aporta la textura crujiente característica del plato y el queso feta, el ingrediente principal, con su característico sabor ligeramente salado. Aunque no solía estar presente en la receta original, el queso ricotta se suele incorporar a las versiones más recientes para suavizar el relleno y aportar una textura cremosa al igual que los huevos y la mantequilla.
Este es un plato que combina sabor, textura y facilidad de preparación. Es ideal como aperitivo, desayuno o cena ligera. Además, su versatilidad permite que se adapte a distintos gustos y preferencias cambiando alguno de los quesos del relleno según preferencias.

Información de la receta
- Tiempo de preparación: 10 minutos
- Tiempo de cocinado: 15 minutos
- Tiempo total: 25 minutos
- Raciones: 12 unidades
- Categoría: entrante
- Tipo de cocina: griega
- Calorías por ración (kcal): 107
Ingredientes de la tiropita
- 200 g de queso feta
- 100 g de queso ricotta
- 1 huevo L
- 1 pizca de pimienta blanca molida
- 3 láminas de masa filo
- 30 g de mantequilla derretida
- Semillas de sésamo

Cómo hacer tiropita
Comenzamos desmenuzando 200 gramos de queso feta para el relleno. Precalentamos el horno a 180 ºC con calor arriba y abajo.

Añadimos 100 gramos de queso ricotta, 1 huevo L y 1 pizca de pimienta blanca molida, y mezclamos bien.

Extendemos 3 láminas de masa filo superpuestas y las cortamos en 4 partes iguales de arriba a abajo. Obtendremos 12 rectángulos como los mostrados en la siguiente fotografía. Los cubrimos con un paño de algodón ligeramente humedecido para que no se sequen. Es importante trabajar la masa filo con agilidad ya que tiende a secarse y quebrarse rápidamente.

Separamos una de las láminas cortadas y la pincelamos con mantequilla derretida. Para derretir la mantequilla, lo más práctico es usar el microondas a intervalos de 10 segundos.

Colocamos una porción del relleno de queso en el extremo de la masa.

Vamos plegando el rectángulo de masa sobre sí mismo, dándole forma triangular según mostramos a continuación. Repetimos con las otras 11 láminas de masa cortada.

Vamos colocando las tiropitas en una bandeja forrada con papel vegetal. Las pincelamos con mantequilla derretida y espolvoreamos un poco de semillas de sésamo.

Llevamos los triángulos de masa filo al horno precalentado y los horneamos durante 15-20 minutos a 180 ºC, hasta que estén dorados. Retiramos del horno y los dejamos templar antes de servir.

Podemos servir las tiropitas tibias o frías.

Resumen fácil de preparación
- Desmenuzamos el queso feta y precalentamos el horno
- Añadimos el queso ricotta, el huevo, la pimienta y mezclamos
- Cortamos la masa filo en rectángulos
- Pincelamos cada rectángulo de masa con mantequilla derretida
- Ponemos una porción del relleno en el extremo
- Doblamos la masa formando un triángulo
- Pincelamos con mantequilla, espolvoreamos sésamo tostado y horneamos 15-20 minutos a 180 ºC
- Retiramos del horno y dejamos templar
- Servimos las tiropitas