
La mezzelune, cuyo nombre significa literalmente «media luna» en italiano, es una pasta rellena que se caracteriza por su forma semicircular y su versatilidad en la cocina. Aunque se disfruta ampliamente en Italia, también es un plato muy popular en zonas de Alemania como el Tirol del Sur, donde se le conoce como Schlutzkrapfen. Es un plato con raíces alpinas que combina ingredientes locales y técnicas tradicionales.
La masa de la mezzelune suele hacerse con harina de trigo o una mezcla de trigo y alforfón, aunque en nuestra versión hemos optado por harina 00, según la clasificación italiana, o harina de media fuerza según la clasificación que usamos en nuestro país, perfecta para conseguir una textura suave y elástica. Prepararla en casa no es complicado, pero sí requiere mimo: la masa debe estirarse muy fina, ya sea con rodillo o con una máquina de hacer pasta, para que quede ligera y hay que sellar bien los bordes para evitar que el relleno se escape durante la cocción. El truco para saber que está lista es sencillo: cuando las piezas floten en el agua hirviendo (alrededor de 2 minutos), ya estarán en su punto.

El relleno de la mezzelune es muy variado y permite combinar ingredientes según gustos. En recetas clásicas, suelen incluir quesos frescos como ricotta, quark o mozzarella, mezclados con espinacas, setas o incluso trufa. Nosotros hemos apostado por un relleno elegante de trufa y queso pecorino, que da un toque sofisticado y lleno de sabor. En nuestro caso, el concentrado de trufa que hemos usado es trufa triturada en aceite de oliva virgen extra, pero podéis elegir cualquier otro que se ajuste a vuestros gustos y presupuestos.
En cuanto a la salsa para acompañar, las opciones son prácticamente infinitas. Desde la típica salsa de tomate frito o pesto hasta una cremosa mezcla de mantequilla y salvia, cada una aporta algo único al plato. En este caso, hemos optado por una combinación de mantequilla, nata y trufa con parmesano rallado y un poco de cebollino fresco para el toque final. El resultado es un plato sabroso y equilibrado, ideal para disfrutar en una ocasión especial o cuando quieras darte un capricho.
La mezzelune no solo es deliciosa, sino también es una forma divertida de experimentar en la cocina. Con un poco de paciencia y creatividad, puedes personalizarla según lo que tengas en la despensa o lo que te apetezca probar. ¡Anímate a hacerla en casa y disfruta de un pedacito de tradición alpina en tu mesa!

Información de la receta
- Tiempo de preparación: 30 minutos
- Tiempo de cocinado: 5 minutos
- Tiempo total: 35 minutos (más el tiempo de reposo de la masa)
- Raciones: 6, 48 mezzelune
- Categoría: plato principal
- Tipo de cocina: italiana
- Calorías por ración (kcal): 651
Ingredientes de la mezzelune
Para la pasta fresca:
- 300 g de harina de trigo 00 o harina de media fuerza
- 3 huevos
- ½ cucharadita de sal
Para el relleno:
- 300 g de queso ricotta
- Pimienta recién molida
- 1 yema de huevo
- 1 cucharada de concentrado de trufa
- 100 g de queso peccorino o parmesano
Para la salsa:
- 400 ml de nata para cocinar
- 1 cucharada de concentrado de trufa
- 30 g de mantequilla
- Cebollino

Cómo hacer mezzelune casera
Para comenzar, vamos a preparar la pasta. Para ello, llevamos a una mesa de trabajo 300 g de harina de trigo tipo 00 o harina de media fuerza. Formamos un volcán con la harina y colocamos en el centro 3 huevos y ½ cucharadita de sal.

Mezclamos los huevos con la harina usando un tenedor hasta que todos los ingredientes queden bien integrados y la masa sea homogénea.

Trabajamos la masa durante unos 8 a 10 minutos amasándola hasta que esté lisa y ligeramente elástica. Luego, la tapamos con un trapo y la dejamos reposar entre 20 y 30 minutos para que tome consistencia.

Mientras la masa reposa, nos ocupamos del relleno. En un bol mezclamos 300 g de queso ricotta, sal, pimienta recién molida, 1 yema de huevo, 1 cucharada de concentrado de trufa y 100 g de queso pecorino o parmesano rallado. Cuando tengamos una mezcla homogénea, la reservamos en la nevera mientras nos ponemos a estirar y cortar la pasta.

Enharinamos una superficie de trabajo y dividimos la masa en dos partes. Estiramos una de las partes hasta que tenga un grosor de unos 5 mm. Para que la pasta quede más fina y uniforme, utilizamos una máquina de hacer pasta; si no la tenemos, podemos usar un rodillo, asegurándonos de estirarla lo más fina posible. Con la máquina de pasta, seguimos laminando hasta obtener un grosor de 4 mm.

Con un cortador redondo de unos 8 cm de diámetro, hacemos círculos de la masa. De esta primera tanda nos saldrán aproximadamente 24 círculos. Luego, amasamos los restos de masa, los estiramos de nuevo y cortamos otros 24 círculos. Así tendremos suficientes para formar nuestros mezzelune.

Colocamos ½ cucharadita de relleno en el centro de cada círculo.

Humedecemos los bordes de la pasta con el dedo mojado en agua y doblamos cada círculo por la mitad, formando la característica forma de media luna. Aseguramos bien los bordes para que no se abra durante la cocción y colocamos las mezzelune terminadas sobre una superficie enharinada.

Cuando estén listas, las cocemos en tandas en abundante agua con sal. Dejamos que se cocinen durante unos 2 minutos, o hasta que floten en la superficie, asegurándonos de que queden al dente.

Mientras se cuecen las mezzelune, preparamos la salsa. En una sartén honda, vertemos 400 ml de nata para cocinar, añadimos una pizca de sal, pimienta recién molida, 1 cucharada de concentrado de trufa y 30 g de mantequilla. Cocinamos a fuego suave hasta que la mantequilla se derrita y todos los ingredientes se mezclen perfectamente.

A medida que las mezzelune estén listas, las pasamos directamente a la sartén con la salsa, añadiendo un poco del agua de cocción para integrar mejor los sabores. Agitamos suavemente la sartén para que la salsa impregne toda la pasta, y añadimos cebollino picado para un toque fresco.

Finalmente, servimos las mezzelune calientes, coronadas con un poco más de pecorino o parmesano rallado.

Resumen fácil de preparación
- Juntamos la harina con la sal y el huevo
- Mezclamos estos ingredientes
- Amasamos y dejamos reposar
- Preparamos el relleno mezclando los ingredientes de este hasta conseguir una mezcla homogénea y reservamos en la nevera
- Estiramos la pasta
- La cortamos en círculos
- Rellenamos los círculos de pasta
- Cerramos la pasta formando medias lunas
- Cocemos la pasta en tandas durante 2 minutos
- Preparamos la salsa calentando a fuego bajo los ingredientes de esta
- Incorporamos la pasta a la salsa y añadimos cebollino
- Servimos las mezzelunes calientes acompañadas con queso rallado