Restaurante Iván Cerdeño, cocina toledana de la memoria

El cocinero Iván Cerdeño continúa con su nutrida trayectoria en el Cigarral del Ángel, un ambiente idílico y con historia en tierras toledanas. Las manos de Cerdeño hacen que este emblemático cigarral conozca nuevos tiempos a través del sabor, la estética y la creatividad de una cocina toledana innovadora y de alta precisión técnica. La propuesta gastronómica se basa en el producto de proximidad, donde los ingredientes de huerto, ribera y monte son los protagonistas de una culinaria de la memoria y el entorno.

Cerdeño trabajó como jefe de cocina durante seis años en La Casa del Carmen. Tres años después se trasladó al Carmen de Montesión, donde ya en solitario consolidó su cocina vanguardista de raíces toledanas que le hizo conseguir la afamada estrella Michelin en 2014. En la actualidad el cocinero se ilusiona al desarrollar en el Restaurante Iván Cerdeño un kit de creaciones que se basan en las raíces, la creatividad, la tradición y la vanguardia.

Restaurante Iván Cerdeño

Entre los platos más representativos del menú, una interpretación de la cocina de ribera y huerta a través de la anguila con hierbas y guisantes; con la perdiz, sardina y escabeche de malvar se alcanzan los sabores propios de las recetas de mar y monte. Más osadía hay en el tuétano de corzo y quisquillas, este plato sabe conjugar productos tan delicados y dulces como las quisquillas con el tuétano del corzo de los Montes de Toledo. Potencia, inteligencia y recuerdos gastronómicos. Estos y otros platos reflejan la huella gastronómica que dejaron las distintas culturas que han habitado la ciudad de Toledo.

Restaurante Iván Cerdeño

Entre los dulces finales, destacan algunos como Recuerdos de Toledo, elaborado con queso, azafrán y especias, un postre capaz de plasmar el Toledo de las Tres Culturas, cristiana, musulmana y judía, capaces de convivir intramuros en paz y armonía durante siglos.

El desfile de sensaciones gastronómicas se puede degustar en la planta superior del palacete, que fue residencia de la escritora, poetisa y compositora Fina de Calderón. Una sala luminosa y dispuesta con gran amplitud que invita a contemplar desde cada mesa de las privilegiadas vistas a la ciudad imperial de Toledo mientras se observa en vivo y en directo el acabado de los platos. En cuanto a la bodega que permanece a la vista de los comensales, está gestionada por Annika García-Escudero, responsable de sala, sumillería y editora de la carta de vinos que complementa la experiencia.