El bacalao es un pescado sabrosísimo que, para mi gusto, brilla especialmente en las recetas que se hacen con los recortes como buñuelos, croquetas, brandada… la textura, que en otras elaboraciones puede resultar algo seca, se vuelve aterciopelada y el punto de sal casa a la perfección con las patatas, los huevos y/o la leche que habitualmente se utilizan en estos platos.
El pastel de bacalao es una de esas recetas, perfecta para aprovechar los cortes menos nobles de este pescado o incluso aprovechar sobras. Para cocinarlo, podemos utilizar cualquier parte del bacalao, pero como irá desmenuzado en el sofrito lo más inteligente es utilizar migas, que son más económicas y se desalan más rápido. Si no tenemos tiempo para desalar el bacalao, es fácil encontrarlo ya desalado en nuestro supermercado habitual.
Con las cantidades abajo detalladas, nos sale un pastel de buen tamaño en un molde redondo de 22 cm de diámetro. Acompañado de una ensalada verde o unos pimientos del piquillo, resulta una comida muy completa y si sobra, casi es una ventaja ya que se conserva perfectamente unos días en la nevera, y frío también resulta delicioso.
Para darle un plus de sabor, podemos naparlo con la salsa de nuestra elección: por ejemplo, un tomate frito o una salsa romesco si lo tomamos caliente, mayonesa o salsa tártara si lo servimos frío. Pero es totalmente opcional, el pastel con estas proporciones queda muy jugoso y se puede tomar solo sin ningún problema.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 15 minutos
- Tiempo de cocinado: 1 hora y 15 minutos
- Tiempo total: 1 hora y 30 minutos
- Raciones: 6
- Categoría: plato principal
- Tipo de cocina: española
- Calorías por ración (kcal): 359
Ingredientes del pastel de bacalao
- 800 g de patatas
- 1 cebolla
- 1 diente de ajo
- 1 puerro
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 500 g de migas de bacalao desalado
- Perejil fresco
- 50 g de mantequilla (y un poco más para el molde)
- 200 ml de leche
- Sal
- 3 huevos
- Pan rallado
- 50 g de queso curado rallado
Cómo hacer pastel de bacalao
Comenzamos colocando 800 g de patatas enteras y lavadas con su piel, en una cacerola y las cubrimos con agua. Llevamos al fuego y las cocemos a fuego medio hasta que estén tiernas (unos 30 minutos).
Mientras se hacen las patatas, picamos finamente 1 cebolla, 1 diente de ajo y 1 puerro.
Ponemos las verduras picadas en una sartén con 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra y las sofreímos a fuego medio hasta que estén bien pochadas. Cuando el sofrito esté muy suave, añadimos 500 g de migas de bacalao desalado. Cocinamos el conjunto hasta que pierda el agua, unos 10 minutos.
Agregamos el perejil picado, removemos todo, apartamos del fuego y reservamos.
Pelamos las patatas cocidas y las pasamos por un pasapurés, o las aplastamos con un pisapatatas o un tenedor.
Agregamos 50 g de mantequilla derretida al puré de patata. Añadimos también 200 ml de leche y mezclamos bien.
Echamos el sofrito de bacalao en el bol de las patatas y, si es necesario, corregimos el punto de sal. Por último, batimos 3 huevos y los incorporamos removiendo hasta que la mezcla quede homogénea.
Preparamos el molde untándolo con mantequilla y pan rallado.
Lo llenamos con la masa y alisamos la superficie con una espátula.
Por último, recubrimos el pastel con 50 g de queso curado rallado y lo llevamos al horno caliente a 180 ºC, con calor arriba y abajo.
Horneamos el pastel durante 45 minutos, vigilando cada cierto tiempo la cocción. Pasado este tiempo, comprobamos que está hecho y si la superficie no está dorada, le damos unos minutos más de grill para que se gratine bien.
Podemos tomarlo inmediatamente, pero recomiendo dejarlo reposar hasta que esté tibio, ya que tomará más cuerpo y será más fácil servir las porciones.
Resumen fácil de preparación
- Cocemos las patatas con su piel
- Picamos ajo, cebolla y puerro para el sofrito
- Pochamos las verduras con aceite de oliva y añadimos el bacalao desmigado
- Agregamos perejil picado y reservamos
- Hacemos puré con las patatas y la mantequilla
- Añadimos leche e integramos todo
- Mezclamos el sofrito de bacalao con el puré y los huevos batidos
- Untamos un molde con mantequilla y pan rallado
- Vertemos la mezcla y la alisamos
- Cubrimos de queso rallado
- Lo horneamos y, si es preciso, le damos un golpe final de grill
- Idealmente, lo dejamos reposar hasta que se temple antes de degustarlo
