
La limonada casera es un refresco natural muy fácil de hacer en casa. Resulta ideal para preparar por la mañana y reservarla en la nevera, para poder degustarla bien fresquita en cualquier momento del día; cuando tengamos sed, queramos hidratarnos o simplemente cuando nos apetezca disfrutar de un trago delicioso.
Su elaboración consiste en algo más que un simple zumo de limón con agua y azúcar ya que para conseguir que el azúcar se mezcle bien en la bebida y no se sedimente en el fondo mientras reposa en la nevera, vamos a preparar un jarabe de azúcar, muy fácilmente, que nos ayudará a que el zumo y el azúcar queden bien mezclados.
La base de esta receta es tan simple como calentar agua con azúcar, dejar enfriar y mezclar con el zumo de limón. A continuación, añadiremos agua y, ¡ya tendremos nuestra limonada casera! Para días de calor, podemos utilizar agua fría y añadir unos cubitos de hielo justo antes de consumir la limonada, para que esta no nos quede aguada.
Un truco que funciona para que los limones tengan más zumo es hacerlos rodar por la encimera antes de exprimirlos. Además, para aprovechar los limones al máximo, os aconsejamos que antes de exprimirlos, ralléis la piel una vez lavada y congeléis la ralladura, os irá perfecta para muchas preparaciones dulces como tartas, cremas y bizcochos o saladas como pangrattato —un pan rallado enriquecido— o salsas.

Información de la receta
- Tiempo de preparación: 10 minutos
- Tiempo de cocinado: 5 minutos
- Tiempo total: 15 minutos (más el tiempo de enfriado)
- Raciones: 4, 600 ml
- Categoría: bebidas
- Tipo de cocina: americana
- Calorías por ración (kcal): 96
Ingredientes de la limonada casera
- 75 ml de agua
- 60 g de azúcar
- 4 limones
- 400 ml de agua fría
- Cubitos de hielo (opcional)

Cómo hacer limonada casera
En primer lugar, calentamos en una cazuela 75 ml de agua con 60 g de azúcar, removiendo para que el azúcar quede bien disuelto. Esto nos llevará unos 3-4 minutos. Dejamos enfriar.

A continuación, lavamos 4 limones y los exprimimos. Obtendremos aproximadamente 300 ml de zumo. Si nuestros limones son más pequeños y no conseguimos esta cantidad de zumo, exprimiremos más.

Colamos el zumo de limón para eliminar la pulpa que el exprimidor no haya podido retener.

Mezclamos el zumo de limón obtenido con el agua azucarada enfriada y añadimos 400 ml de agua fría.

Removemos bien para que quede bien mezclado y servimos. Si no la vamos a consumir de inmediato, la reservaremos en la nevera hasta su consumo.

Para conseguir una bebida todavía más refrescante, podemos añadir unos cubitos de hielo en el momento de servir la limonada, nunca antes para evitar aguar la bebida.

Resumen fácil de preparación
- Calentamos el agua con el azúcar
- Exprimimos los limones
- Colamos el zumo de limón
- Mezclamos con con el agua azucarada y el agua fría
- Servimos la limonada casera o la reservamos en la nevera
- Opcionalmente, podemos servirla con hielo