Los chiles jalapeños rellenos de queso pueden servirse como aperitivo en fiestas informales o barbacoas, o como guarnición de tu plato mexicano favorito. Añaden un toque picante y de sabor que complementa cualquier plato. Además, son tan fáciles de hacer que los puedes preparar en un abrir y cerrar de ojos.
Para que esta receta de chiles rellenos de queso tan sencilla nos quede perfecta y sabrosa, además de los ingredientes principales, que son el jalapeño y el queso, necesitamos conseguir una fritura perfecta; bien crujiente y nada aceitosa para lo que resulta fundamental que no se abran los jalapeños haciendo que se salga el queso en la fritura.
A continuación, te detallamos la receta así que, busca los ingredientes necesarios y prepárate para disfrutar de esta receta tan original, fácil y sabrosa.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 15 minutos
- Tiempo de cocinado: 5 minutos
- Tiempo total: 20 minutos
- Raciones: 4
- Categoría: entrante
- Tipo de cocina: mexicana
- Calorías por ración (kcal): 176
Ingredientes de los jalapeños rellenos de queso
- 10-12 chiles jalapeños
- 50 g de queso mozzarella (u otro queso que funda bien)
- 1 huevo
- 50 g de harina de trigo
- 50 g de pan rallado
- Aceite de oliva abundante para freír
Cómo hacer jalapeños rellenos de queso
Comenzamos lavando unos 10-12 chiles jalapeños verdes bien frescos, preferiblemente del mismo tamaño, y que tengan el rabito. Les hacemos una abertura por un lateral, les retiramos las semillas y las hebras con ayuda de una cuchara y los vamos colocando en un plato.
A continuación, cortamos 50 g de queso mozzarella en tacos del tamaño de los chiles. Cortaremos tantos trozos de queso como chiles tengamos. También podemos utilizar queso cheddar o cualquier otro que funda bien, incluso rellenarlos de queso crema.
Una vez tenemos los chiles verdes limpios y vacíos, y el queso cortado, vamos colocando los tacos de queso dentro de los chiles.
Cerramos los chiles de manera que el queso nos quede dentro y los vamos colocando en un plato o bandeja.
Batimos 1 huevo. Preparamos otros dos cuencos con 50 g de harina de trigo y 50 g de pan rallado. Pasamos cada chile por harina, sellándolo bien, y luego por huevo y por pan rallado. Intentaremos evitar que el rebozado entre en el interior de los chiles.
Si con este rebozado los chiles no quedaran bien cubiertos, les volvemos a hacer otro rebozado. La idea es que nos queden bien sellados para que no se salga el queso del relleno al freírlos. Los vamos colocando en un plato y los dejamos reposar un rato para que se selle y se seque el rebozado.
A continuación, ponemos abundante aceite de oliva a calentar en una sartén. La cantidad de aceite a usar en la fritura dependerá del tamaño de la sartén. Cuando el aceite esté bien caliente, pero sin humear, los vamos echando uno a uno sin amontonarlos ni poner muchos a la vez.
Los dejamos freír durante unos 2 o 3 minutos y, con unas pinzas, los vamos volteando para que se queden bien dorados y fritos por cada lado.
Cuando veamos que estén dorados a nuestro gusto, los retiramos para un plato forrado con papel de cocina para que escurran bien el aceite.
Los colocamos en una fuente o plato y los servimos calientes.
Resumen fácil de preparación
- Lavamos, cortamos y vaciamos de semillas los chiles jalapeños
- Cortamos tacos de queso
- Rellenamos los chiles con el queso
- Los cerramos con el queso dentro y los reservamos
- Rebozamos los chiles con harina, huevo batido y pan rallado
- Los sellamos bien y los colocamos en un plato
- Calentamos el aceite y freímos los chiles poco a poco
- Los vamos volteando para que se doren por igual
- Los retiramos a un plato con papel de cocina
- Los colocamos en una bandeja y los servimos calientes
