Ambivium, la gastronomía de la Bodega Pago de Carraovejas

El restaurante Ambivium se encuentra en la Bodega Pago de Carraovejas, un espacio de clara cocina fiel al terruño y a la unión indisoluble entre vino y gastronomía. En el año 2017, Pedro Ruiz Aragoneses –actual director general de la marca– se aventuró con una propuesta de alta gastronomía dentro de la propia bodega ubicada en Peñafiel, población de Valladolid.

Ambivium nació con una ideología apegada a la tierra; a los productos de kilómetro 0, a la estacionalidad de sus elaboraciones y al contexto en el que está enmarcado: la propia bodega Pago de Carraovejas. La despensa del restaurante se nutre de su propio huerto ecológico y que se sitúa a escasos cincuenta metros de los fogones. Aparte del producto local, a este establecimiento llegan excelentes materias del mar y la tierra. Los platos se unen a los grandes vinos para dar con sintonías perfectas como la que aparece en Oda al arroz, preparación dedicada a los sabores propios de Japón o una sofisticada versión de la lubina meunière.

Ambvivium

Para conocer por completo la idea tras este restaurante, se recomienda optar por el menú degustación, un interesante recorrido por los platos predilectos del equipo de cocina. La experiencia es un viaje sensorial total por los manjares más exquisitos de Ambivium. Sabores, texturas, aromas y combinaciones con los que vivir una culinaria reconocible y comprensible, sin que por ello sea menos sorprendente.

Ambvivium

El vino es el eje central de Ambivium. En su barra aguarda una selección confeccionada por el equipo de sumillería pensada para degustar en pequeñas cantidades. Copa a copa, se desarrolla un periplo por las añadas más características de algunos blancos singulares como los de Ossian y los genuinos y más conocidos vinos de Finca y Parcela de Pago de Carraovejas.

Ambvivium

Aparte de los vinos nacionales, una notable lista de referencias extranjeras hace de paseo por los viñedos de las denominaciones de origen vinícolas más importantes de Europa. En la barra también hay sitio para los cócteles, estos van desde las mezclas más clásicas como el dry martini a base de ginebra, vermouth seco, twist de limón y aceituna a tragos que nacen en el pequeño laboratorio de investigación y desarrollo del establecimiento. El Dark and stormy es un buen ejemplo de estos imaginativos cócteles, se trata de un atrevido trago largo que incluye ron añejo, zumo de lima y ginger beer.