No hay nada mejor que cocinar con productos de temporada: las elaboraciones son mucho más gustosas y sabrosas, y estaremos dando salida a alimentos con mucha oferta que encontraremos en el mercado a muy buen precio. Ahora que decimos adiós al verano, vamos a aprovechar las últimas ciruelas haciendo una tarta y así despedirnos de ellas hasta el año que viene.
Existen muchas versiones de tartas de ciruelas pero la que vamos a realizar en esta ocasión es tradicional de la gastronomía anglosajona y su proceso de elaboración es muy sencillo y rápido. Se trata de una tarta que emplea masa quebrada, que va recubierta por ciruelas maceradas y éstas a su vez recubiertas por un enrejado con la misma masa.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 30 minutos
- Tiempo de cocción: 25 minutos
- Tiempo total: 55 minutos
- Raciones: 6
- Categoría: repostería
- Tipo de cocina: internacional
- Calorías: 222 kcal por cada 100 g
Ingredientes de la tarta de ciruelas para 6 personas
- 2 bases circulares de masa quebrada
- 550 g de ciruelas rojas
- 45 g de azúcar moreno de caña
- 40 g de mantequilla sin sal
- 30 g de copos de avena
- 25 ml de leche
- 15 g de almidón de maíz
- 10 ml de zumo de limón
- 1 cucharada de postre de canela

Cómo hacer la tarta de ciruelas
Lo primero que tenemos que hacer para elaborar la tarta de ciruelas es lavar y retirar la pepita a las frutas. Las cortaremos en pequeños trozos y las introduciremos en un plato o recipiente hondo.

Sobre las ciruelas troceadas añadimos el azúcar moreno, el almidón de maíz y el zumo de limón.

Mezclamos hasta impregnar por completo las ciruelas troceadas y dejamos macerar 10-15 minutos.

Con la ayuda de un cortador estriado cortamos en tiras de un centímetro de ancho una de las bases de masa quebrada. Si no disponemos de dicho cortador lo podemos hacer con un cuchillo.

Cubrimos la base de un molde circular de 20 centímetros de diámetro con una hoja de papel apto para hornear y encima colocamos la otra base de masa quebrada, ajustándola bien a las paredes del molde.

Cubrimos la base de la tarta con los copos de avena y sobre ellos las ciruelas maceradas con todos sus jugos.

Formamos un enrejado con las tiras de masa quebrada que habíamos cortado y lo ponemos cubriendo toda la superficie de la tarta.

Cortamos la masa que sobresalga del molde, sellando bien todo el perímetro para que no se despegue durante el horneado. Pincelamos el enrejado con leche y distribuimos la mantequilla en pequeños trozos por toda la superficie.

Horneamos en horno precalentado a 200 ºC con calor arriba y abajo, con ventilador durante 25 minutos o hasta que la superficie se torne de un ligero color dorado.

Retiramos la tarta del horno y la desmoldamos sobre una rejilla para evitar que la base de la tarta se condense y humedezca dentro del molde.

Esperamos unos minutos para que atempere antes de servirla para consumir.

Resumen fácil de preparación
- Lavar y retirar la pepita a las ciruelas. Cortarlas en trozos pequeños y echar en un recipiente hondo
- Añadir el azúcar moreno, el almidón de maíz y el zumo de limón a las ciruelas troceadas
- Mezclar hasta impregnar por completo todos los trozos de ciruela y macerar durante 10-15 minutos
- Cortar en tiras de un centímetro de ancho una de las bases de masa quebrada
- Cubrir con la otra base de masa quebrada un molde circular de 20 centímetros de diámetro amoldando la masa al molde
- Echar los copos de avena en la base de la tarta y las ciruelas ya maceradas con todos sus jugos
- Cubrir con las tiras de masa quebrada formando un enrejado
- Cortar la masa sobrante, sellar los bordes, pincelar toda la superficie con leche y distribuir trocitos de mantequilla por todo el enrejado
- Hornear a 200 ºC con calor arriba y abajo con ventilador durante 25 minutos o hasta que la superficie se dore
- Desmoldar la tarta sobre una rejilla para que atempere antes de servir