Cómo ahorrar aceite de oliva

Una aceitera con aceite de oliva
Con el precio del aceite de oliva por las nubes buscar formas para ahorrar aceite de oliva es prioritario. Te mostramos diferentes maneras de reducir el gasto y con ello ahorrar algunos valiosos euros.
Por Héctor Hernández
12 de septiembre de 2023

El aceite de oliva es uno de los ingredientes más utilizados y apreciados en la gastronomía española, pero también uno de los más caros ahora mismo. Por eso, es conveniente saber cómo optimizar su uso y evitar el desperdicio. A continuación, te damos algunos consejos para ahorrar aceite de oliva en la cocina sin renunciar al sabor y a la calidad de tus platos. Con estos consejos podrás ahorrar aceite de oliva en la cocina y disfrutar de una alimentación más económica ahora que su precio se ha disparado.

Usar aceite de girasol para las frituras

El aceite de girasol es más barato que el de oliva y el de girasol alto oleico tiene un punto de humo muy alto, lo que significa que resiste mejor las altas temperaturas sin quemarse ni perder sus propiedades. Por eso, es ideal para todo tipo de frituras como croquetas, buñuelos o churros. El aceite de girasol alto oleico es el más recomendable, ya que tiene un mayor contenido de este ácido oleico, un tipo de grasa monoinsaturada beneficiosa para la salud cardiovascular.

Usar freidoras de aire

Las freidoras de aire son los electrodomésticos de moda y permiten freír los alimentos con muy poco aceite por no decir nada, gracias a un sistema de circulación de aire caliente que los cocina de forma uniforme dando resultados que no te esperas. Así, se consigue una textura crujiente y un sabor similar al de la fritura tradicional, pero usando menos grasas para cocinar y por tanto consiguiendo comidas más saludables. Además, las freidoras de aire son fáciles de limpiar y no generan humos ni olores. Puedes usarlas para preparar patatas fritas, nuggets, alitas de pollo, verduras y un sinfín de ingredientes que normalmente pasan por una sartén con aceite. Aquí una muestra con algunas de las mejores recetas para freidora de aire que puedes hacer.

Usar horno

Otra forma de ahorrar aceite de oliva es usar el horno en lugar de la sartén o la freidora. El horno permite cocinar alimentos con su propio jugo o con un poco de agua, vino o caldo, sin necesidad de añadir mucho aceite. Además, ofrece una cocción uniforme y conserva mejor los nutrientes y el sabor de los alimentos. Existen muchas recetas al horno que normalmente se hacen fritas pero que se pueden hacer perfectamente en este aparato como empanadillas, patatas, pescado o carne.

Incorporar el aceite a la mazamorra cordobesaDamián Serrano

Freír menos y optar por elaboraciones a la plancha

Otra opción para ahorrar aceite de oliva es reducir el consumo de fritos y optar por otras elaboraciones más saludables y menos grasientas, como la plancha, el vapor, el microondas o el papillote. Estas técnicas requieren muy poco aceite o ninguno, y permiten obtener platos sabrosos y nutritivos. Por ejemplo, el huevo frito está igual de rico si se hace un huevo a la plancha y las verduras quedan tiernas y crujientes si se hacen al vapor.

Usar aceite en spray

El aceite en spray es una forma práctica y económica de usar el aceite de oliva, ya que permite administrarlo y aplicarlo mejor sobre los alimentos o recipientes. Así, se evita el exceso de aceite y se ahorra dinero. El aceite en spray es especialmente útil para usar en la freidora de aire o para hacer platos a la plancha usando cantidades muy pequeñas de aceite. Lo ideal sería pasar el aceite de botella a un pulverizador de aceite porque el que venden ya en spray puede ser incluso más caro.

Reutilizar el aceite

Por último, otra forma de ahorrar aceite de oliva es reutilizarlo siempre que sea posible. Para hacerlo hay que tener en cuenta algunas precauciones, como filtrar el aceite después de cada uso para eliminar los restos de alimentos, guardarlo en un recipiente hermético y oscuro en un lugar fresco y seco o no mezclarlo con otros tipos de aceites. Además, hay que evitar reutilizar el aceite cuando haya alcanzado su punto de humo (cuando empieza a humear y a desprender un olor desagradable), ya que se deteriora y pierde sus propiedades nutricionales y organolépticas. Lo más recomendable es reutilizar el aceite usado para cocinar elaboraciones en las que el aceite no se mancha como las patatas fritas o la tortilla de patatas.