Una de las mejores formas de introducir las verduras en el menú diario es a través de las cremas. Presentan poca complicación en su elaboración y al tener una textura tan suave gustan tanto a niños como a grandes.
La crema de cebolla es quizás poco conocida entre las cremas de verduras. Es más conocida la sopa de cebolla francesa, servida con tostadas gratinadas con queso. Para hacer la crema de cebolla también se parte de la cebolla pochada a fuego lento para extraer al máximo su sabor dulce, a la que se le añade caldo de pollo o verduras.
A diferencia de la sopa, a la crema se le añade nata para cocinar y se termina triturando todos los ingredientes. Para aportarle un extra de cremosidad, le hemos añadido mantequilla ya fuera del fuego y cuando la crema está aún caliente.
Aconsejamos servir la sopa caliente y acompañada con picatostes crujientes.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 10 minutos
- Tiempo de cocinado: 1 hora
- Tiempo total: 1 hora y 10 minutos
- Raciones: 2
- Categoría: entrante
- Tipo de cocina: internacional
- Calorías por ración (kcal): 320
Ingredientes de la crema de cebolla para 2 personas
- 3 cebollas blancas grandes
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- Sal
- Pimienta negra recién molida
- 500 ml de caldo de pollo
- 200 ml de nata para cocinar
- 20 g de mantequilla
- Picatostes y perejil fresco para decorar
Cómo hacer crema de cebolla
Cortamos en juliana fina 3 cebollas blancas grandes. Cuanto más fina sea la juliana mayor facilidad tendrá la cebolla para caramelizarse.
Ponemos en un cazo a fuego medio 2 cucharadas de aceite de oliva y cuando esté caliente, le añadimos las cebollas picadas en juliana fina. Ponemos un poco de sal y pimienta recién molida.
Pochamos las cebollas a fuego lento durante 45 minutos dándole vuelta de vez en cuando para que se caramelice por igual.
Pasado este tiempo, vertemos 500 ml de caldo de pollo sobre la cebolla pochada.
Ahora vertemos 200 ml de nata para cocinar y seguimos cocinando la crema durante 15 minutos más a fuego suave.
Retiramos el cazo del fuego y trituramos la crema hasta que quede sin ningún grumo y tenga una textura sedosa. Si queréis, podéis pasarla por un colador para aseguraros que no queda ningún trozo de cebolla sin triturar. Una vez triturada la crema, le añadimos 20 g de mantequilla para aportar un extra de cremosidad.
Servimos la crema de cebolla recién hecha con picatostes crujientes y perejil fresco para decorar.
Resumen fácil de preparación
- Cortar la cebolla en juliana
- Poner la cebolla en un cazo con el aceite caliente
- Pochar la cebolla a fuego lento 45 minutos
- Verter el caldo
- Verter la nata, cocinar a fuego suave y triturar la crema
- Añadir la mantequilla
- Servir la crema caliente con picatostes
