Las baleadas son uno de los platos más emblemáticos y queridos de Honduras que representan mucho más que una simple comida, pues se les considera un símbolo de identidad nacional y un pilar de la cocina popular.
Se componen típicamente de una tortilla de trigo rellena de frijoles y queso. Sin embargo, su versatilidad es tal que permite innumerables variaciones en sus añadidos, adaptándose a todos los gustos y momentos del día. Son una opción perfecta para desayunos, cenas o incluso como un tentempié callejero.
El origen de las baleadas se remonta al norte de Honduras a mediados del siglo pasado. En un primer momento se ideó como comida para los trabajadores locales, pero tal fue su éxito que poco a poco fue extendiéndose a puestos de comida a lo largo y ancho del país para finalmente dar el salto también a los hogares hondureños.
Las ventajas y quizás los elementos clave de la popularidad de las baleadas son su sencillez de preparación y su versatilidad a la hora de elegir rellenos. Comenzando con la baleada sencilla con tortilla, frijoles refritos y queso, es bastante común complementar con huevos revueltos o aguacate (o los dos). Luego tenemos las baleadas especiales o «baleadas con todo» que incluyen carnes como chorizo, pollo o salchichas y otros añadidos como pico de gallo o tajadas de plátano. Incluso puedes ponerle unos camarones. ¡Te toca decidir qué combinación te apetece más!
Cuando vayas a prepararlas, puedes hacerlas totalmente caseras utilizando nuestras recetas de tortillas de trigo y de frijoles refritos. El queso que se suele usar suele ser un queso blanco latino que o bien se ralla o se desmenuza, aunque puedes ponerle el que tengas a mano. Para terminar, uno de los ingredientes quizá más peculiares de las baleadas es la mantequilla hondureña. Este tipo de mantequilla no es como la que tenemos por aquí, es más bien como una crema agria, pero algo más suave. Si no la encuentras en las tiendas de productos latinos, en la receta te contamos cómo hacer un sustituto.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 5 minutos
- Tiempo de cocinado: 10 minutos
- Tiempo total: 15 minutos
- Raciones: 4 unidades
- Categoría: desayuno
- Tipo de cocina: hondureña
- Calorías por ración (kcal): 351
Ingredientes de las baleadas hondureñas
Para la mantequilla hondureña:
- 20 g de mantequilla a temperatura ambiente
- 100 g de crème fraîche (o 100 ml de nata para montar y unas gotitas de limón)
Para montar las baleadas:
- 100 g de queso blanco rallado (queso latino)
- 200 g de frijoles refritos
- 4 tortillas de trigo
Cómo hacer baleadas hondureñas
Para comenzar, preparamos los ingredientes fríos. Procedemos a preparar la mantequilla hondureña: mezclamos poco a poco 20 g de mantequilla a temperatura ambiente con 100 g de crème fraîche o, en su defecto, con 100 ml de nata para montar con unas gotas de limón. A continuación, rallamos o desmenuzamos 100 g de queso blanco, que debe ser del tipo latino.
Lo siguiente que necesitamos son 200 g de frijoles refritos. Si los usamos ya preparados en conserva, simplemente los calentamos siguiendo las instrucciones del fabricante. Pero te recomendamos que los prepares con nuestra receta de frijoles refritos a partir de frijoles cocidos.
Una vez tenemos los frijoles listos, nos ponemos con la elaboración de las 4 tortillas de trigo. Igual que antes, te recomendamos que las prepares con nuestra receta de tortillas de trigo para que las disfrutes recién hechas. No obstante, si tienes las tortillas ya preparadas, deberás calentarlas en una sartén a temperatura media-alta hasta que estén un poco doradas por cada cara y flexibles. Conforme las vamos calentando, las guardamos envueltas en un paño de cocina limpio.
Con las tortillas aún calientes, procedemos a untar cada una generosamente con un par de cucharadas de frijoles refritos calientes. Aquí puedes ponerlo únicamente a un lado o untar la tortilla uniformemente por toda su superficie, dejando un pequeño borde para evitar que se salgan al doblarlas.
Luego, espolvoreamos el queso rallado sobre los frijoles aún calientes, lo que permitirá que se funda ligeramente.
Terminamos de rellenar cada baleada con un poco de mantequilla hondureña por encima del queso. En nuestro caso, para que nos sea más fácil repartirla, la hemos puesto en un biberón de cocina, pero valdría también repartirla poco a poco con una cuchara.
El último paso es cerrar las baleadas doblando cada tortilla por la mitad y las servimos inmediatamente mientras aún están calientes.
Resumen fácil de preparación
- Elaborar el sustituto de mantequilla hondureña con sus ingredientes y rallar el queso
- Preparar los frijoles refritos
- Hacer las tortillas de trigo o calentarlas
- Untar cada tortilla con frijoles refritos
- Espolvorear con queso rallado
- Terminar con un poco de mantequilla hondureña
- Cerrar la baleada doblando la tortilla por la mitad
