El maíz es un ingrediente básico en la gastronomía del continente americano. Desde tiempos precolombinos, este cereal ha sido el elemento esencial en la dieta diaria de la gran mayoría de hogares, incorporado tal cual en guisos y sopas o como base para elaborar distintas masas, como las tortillas o las arepas.
De las segundas te vamos a hablar hoy aquí, pero no las tradicionales arepas venezolanas sino de otra variante muy popular en su vecina Colombia; las arepas de choclo que se elabora a partir de maíz tierno o dulce, que allí se le conoce como choclo, de ahí el sobrenombre que reciben.

La arepa de choclo es uno de esos platos tan populares en Colombia que se prepara con frecuencia en casa, se sirve en restaurantes o se consume sobre la marcha en un puesto callejero. Recetas hay muchas y cada familia suele tener su propia variante. Entre todas, cabe destacar quienes prefieren ponerle huevo, lo que aporta un plus de esponjosidad, aunque esto hace que la masa necesite más harina. Quienes prescinden de él, les gusta conservar un sabor más puro a maíz.

En nuestro caso, optamos por no incluir huevo, pero sí sumar queso rallado a la mezcla, ya que las vuelve aún más sabrosas. Por lo general, un buen queso campesino o queso latino rallado le va genial. Este queso es el se utiliza tradicionalmente por allí, aunque si no lo encuentras, un queso mozzarella o suave es una buena alternativa. Si quieres, puedes añadir 1 huevo a nuestra receta y terminar ajustando la textura poco a poco con más harina. Lo importante es que te las prepares como más te guste.
Y para terminar, cuando están listas, lo ideal es disfrutarlas recién hechas y aún calientes, solas o rellenas de queso que se derrite con el calor de las arepas. También es muy común acompañarlas con miel, que las convierte en un bocado perfecto para desayunos o meriendas. ¡Tú decides!

Información de la receta
- Tiempo de preparación: 5 minutos
- Tiempo de cocinado: 10 minutos
- Tiempo total: 30 minutos
- Raciones: 2 (4 arepas)
- Categoría: plato principal
- Tipo de cocina: colombiana
- Calorías por ración (kcal): 375 (arepas solas), 565 (rellenas de queso)
Ingredientes de la arepa de choclo
Para las arepas:
- 200 g de maíz tierno, peso escurrido (en conserva o 2 mazorcas)
- 1 cucharada de azúcar (blanco, moreno, panela…)
- 60 g de harina de maíz precocida
- 10 g de mantequilla (y un poco más para engrasar la plancha)
- Sal
- 50 ml de leche
- 100 g de queso rallado (campesino o latino, mozzarella u otro suave y fundente)
Para servir (opcional):
- Miel
- 6 lonchas de queso campesino o latino

Cómo hacer arepa de choclo
Para comenzar nuestra receta, primero nos ocupamos del maíz. Si usamos mazorcas de maíz tierno, tanto crudas o cocidas, debemos desgranarlas hasta obtener aproximadamente 200 g de maíz, lo que viene a ser un par de mazorcas. Si preferimos usar maíz dulce en conserva, simplemente lo escurrimos bien para eliminar el líquido y lo pesamos para tener la cantidad necesaria.

A continuación, trituramos el maíz con una batidora o procesador de alimentos hasta formar una pasta. Si se desea, se pueden dejar algunos trozos pequeños para apreciar mejor el maíz en las arepas.

Seguidamente, incorporamos al maíz 1 cucharada de azúcar (que puede ser blanco, moreno o incluso panela), 60 g de harina de maíz precocida, 10 g de mantequilla que habremos derretido previamente durante unos segundos en el microondas y una pizca de sal. Mezclamos bien para que todos los ingredientes se integren de manera uniforme.

Ahora, ajustamos la textura de la masa con un poco de leche. La consistencia que buscamos es que la masa quede manejable, homogénea y compacta, como plastilina, sin que llegue a resultar demasiado líquida. En nuestro caso, con maíz tierno crudo hemos necesitado 50 ml de leche que hemos añadido cucharada a cucharada para no pasarnos. Si usamos el maíz en conserva, no se necesitará tanta leche ya que este último es más húmedo.

Una vez lista nuestra masa, le vamos a añadir ese extra de 100 g de queso rallado. Mezclamos de nuevo para distribuirlo por toda la masa, probamos y ajustamos de sal y azúcar si fuera necesario.

Acto seguido, dejamos reposar la masa durante unos 15 minutos para que los ingredientes se asienten y, sobre todo, le de tiempo a la harina de maíz a humedecerse correctamente. Cubrimos la masa con un paño limpio para evitar que se reseque.

Tras el reposo, ponemos a calentar a fuego medio una sartén o plancha engrasada con un poco de mantequilla y, mientras se caliente, dividimos la masa en 4 porciones. Cuando la plancha esté caliente, vamos colocando la masa, dándole forma redonda con medio centímetro de grosor.

Las dejamos cocinar unos 3 minutos o hasta que las arepas de choclo comiencen a dorarse por el primer lado. Les damos la vuelta con cuidado, ayudándonos de una espátula para evitar que se rompan ya que todavía son algo frágiles. Seguimos cocinándolas hasta que estén doradas por ambos lados y notemos que se vuelven más manejables.

Cuando las tengamos listas, las retiramos a un plato. El nivel de dorado lo podemos ajustar al gusto, aunque lo ideal es que no nos queden muy oscuras. Obviamente, si nuestra sartén o plancha es pequeña, haremos las arepas por tandas, repitiendo el mismo proceso de cocción y dejando que la plancha vuelva a coger temperatura entre tandas antes de añadir más masa.

Finalmente, se pueden dejar solas, ponerles unos hilos de miel o incluso se puede hacer como un sándwich con nuestro queso favorito entre dos arepas que se fundirá ligeramente con el calor. Es muy común usar el queso campesino o queso latino para acompañarlas. Con unas 6 lonchas (3 por persona) será suficiente.

Servimos enseguida, recién hechas y aún calientes.

Resumen fácil de preparación
- Desgranar las mazorcas de maíz o choclo, o escurrir el maíz en conserva
- Triturar el maíz
- Incorporar el azúcar, la harina de maíz, la mantequilla derretida y una pizca de sal
- Mezclar bien y ajustar consistencia con la leche poco a poco
- Integrar el queso rallado
- Dejar reposar 15 minutos
- Dividir la masa en 4 y dorar las arepas en una sartén o plancha bien caliente
- Darles la vuelta con cuidado
- Continuar hasta terminar la masa
- Dejarlas solas o acompañarlas con queso o miel
- Servir recién hechas