El coulis que vamos a preparar en esta ocasión es de fresas, aunque podríamos seguir esta misma receta para prepararlo con otras frutas como frambuesas, moras o con una mezcla de frutos rojos, frutas del bosque...
El coulis de fresa se puede preparar con fresas frescas o congeladas. En caso de usar fresas frescas, en primer lugar tendremos que limpiarlas desechando el pedúnculo y cortarlas en trozos pequeños para acelerar la cocción y conseguir que la fruta quede concentrada, acentuando su sabor.
La cantidad de azúcar a añadir dependerá siempre del punto de dulzor de la fruta utilizada, por lo que os recomendamos que lo probéis y lo adaptéis a vuestro gusto.
Para su elaboración, vamos a cocinar la fruta con el azúcar a fuego muy bajo para preservar el color de las fresas. A continuación, trituraremos la mezcla obtenida para conseguir una consistencia muy suave y líquida.
Podemos utilizar el coulis de fresa para realzar todo tipo de postres, como por ejemplo, para salsear una panna cotta, para acompañar unos crepes, con un yogur natural o como salsa en un helado. Las posibilidades de esta elaboración son ilimitadas.
El coulis hay que guardarlo en un recipiente cerrado en la nevera y consumirlo en un breve espacio de tiempo, aunque podemos aumentar las cantidades de esta receta y congelarlo para tenerlo disponible en el congelador durante un máximo de 2 meses. Podemos hacer esto para aprovechar la fruta de temporada, cuando la encontramos con su sabor perfecto y normalmente a mejor precio. Para consumir el coulis congelado, hay que llevarlo a la nevera el día anterior, para que se descongele poco a poco.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 5 minutos
- Tiempo de cocinado: 10 minutos
- Tiempo total: 15 minutos
- Raciones: 3, 160 ml
- Categoría: repostería
- Tipo de cocina: francesa
- Calorías por ración (kcal): 93
Ingredientes del coulis de fresa
- 200 g de fresas
- 50 g de azúcar
- ½ cucharada de zumo de limón
Cómo hacer coulis de fresa
Limpiamos 200 g de fresas, les retiramos el pedúnculo y las cortamos en trozos pequeños.
Las disponemos en un cazo con 50 g de azúcar y media cucharada de zumo de limón.
Cocinamos a fuego lento durante 10 minutos, aplastando las fresas mientras se cocinan.
Una vez cocinadas, trituramos las fresas con ayuda de una batidora.
Pasamos la mezcla por un colador para eliminar trozos y semillas y conseguir una textura muy fina y homogénea.
Dejamos enfriar el jugo obtenido antes de guardarlo en la nevera.
Utilizamos a conveniencia para decorar y realzar todo tipo de postres.
Resumen fácil de preparación
- Limpiamos las fresas
- Las pasamos a un cazo
- Las cocinamos con el azúcar y el zumo de limón
- Trituramos la mezcla
- La colamos
- Dejamos enfriar
- Servimos
