No hay duda de que para mucha gente, una de las mejores maneras de empezar el día es con una buena taza de café con leche. Hay algo mágico en la combinación de un café rico y fuerte con una leche cremosa y espumosa que hace que esta bebida sea una absoluta delicia para los sentidos.
La clave para hacer un café con leche perfecto está en la proporción correcta de café y leche, así como en la calidad de los ingredientes utilizados. La proporción típica es de 1 parte de café por 2 partes de leche, aunque podemos ajustar esta proporción según nuestras preferencias y gustos.
Además, podemos usar cualquier leche que nos guste o que tomemos habitualmente; desnatada, leches vegetales, más o menos caliente y con o sin espuma. Todo está aceptado y cada día, la oferta de esta bebida es más amplia.
A continuación, te contamos cómo preparar un café con leche perfecto en casa, siguiendo una receta básica y sencilla para que puedas experimentar con diferentes variaciones y adaptarlo a tus gustos. Así que coge tu taza favorita y saborea cada sorbo de esta creación celestial.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 5 minutos
- Tiempo de cocinado: 1 minuto
- Tiempo total: 10 minutos
- Raciones: 1
- Categoría: bebidas
- Tipo de cocina: internacional
- Calorías por ración (kcal): 41 sin azúcar
- Calorías por ración (kcal): 70 con azúcar
Ingredientes del café con leche por persona
- 30 ml de café solo
- 60 ml de leche
- 1 cucharadita de azúcar (opcional)
Cómo hacer café con leche
Comenzamos preparando 30 ml de café solo. Para ello, podemos hacer una taza de café expreso o usar la cafetera que usemos habitualmente, sea del tipo que sea.
Calentamos 60 ml de leche. En nuestro caso, hemos usado leche entera aunque se puede usar cualquier otra al gusto. Para calentar la leche, podemos usar el microondas, un cazo o la propia cafetera si tiene esta opción. Si nos gusta la leche con espuma y no tenemos esta opción en nuestra cafetera, podemos usar un batidor de leche a pilas.
Una vez tenemos el café listo y la leche bien espumada y cremosa, ya podremos preparar nuestro café con leche. Para ello, seleccionamos una taza amplia y echamos el café solo en primer lugar.
A continuación, añadimos la leche caliente, con cuidado y desde poca altura para que se vaya mezclando poco a poco con el café. Si no queremos el café muy caliente, en este momento podemos añadir un poco de leche fría.
Finalmente, vamos dejando caer la espuma de la leche en la superficie. Aunque esto es totalmente opcional, podemos aprovechar este momento para hacer algún dibujo sobre el café con la espuma de la leche, haciendo movimientos con la jarra.
Una vez tenemos nuestro café listo, lo servimos inmediatamente.
Opcionalmente, le podemos añadir 1 cucharadita de azúcar u otro endulzante al gusto, aunque esto es opcional y según gustos.
Servimos el café recién hecho.
Resumen fácil de preparación
- Preparamos un café solo
- Calentamos la leche
- Echamos el café en la taza
- Añadimos la leche caliente
- Dejamos caer la espuma de la leche en la superficie
- Servimos inmediatamente
- Le añadimos azúcar de manera opcional
- Degustamos el café con leche recién hecho
