Rambután: qué es, beneficios y propiedades

Fruta exótica conocida como rambután
Te hablamos del rambután, una fruta exótica tropical de apariencia similar al lichi, rica en antioxidantes, apta para platos dulces o salados y que cuenta con algunas contraindicaciones que conviene conocer.
Por Laia Shamirian 07 de mayo de 2025

El rambután es una frutilla tropical peculiar, de cáscara roja y largas puntas, que ha visto incrementada su popularidad. Con una pulpa blanca baja en calorías y rica en ciertas vitaminas, aprender a utilizarla en postres, jugos y platos salados puede traernos muchos beneficios, aunque también debemos conocer cómo manejarla para evitar las posibles contraindicaciones.

Qué es el rambután

El rambután (Nephelium lappaceum) es una fruta exótica originaria del sudeste asiático que presenta una cáscara rojiza con puntas finas que al roce parecen hebras de silicona. Tras esta fina cáscara esconde una pulpa blanca, fresca y perfumada que envuelve una gran semilla negra.

Este fruto, que nace del árbol con el mismo nombre, es conocido como «lichas» en la mayor parte de Latinoamérica y como «rambután» o «achotillo» en Colombia y Ecuador. No es de extrañar que alguna de estas denominaciones se asemeje a los lichis, otro fruto asiático tropical que también pertenece a la familia Sapindaceae y es rojizo de carne blanca. Tan parecidos, que para diferenciarlos hay que fijarse en las puntas, que son mucho más largas en el rambután y en el tamaño global del fruto, siendo más grande con unos 4 cm y el lichi más pequeño con aproximadamente 2,5 cm.

En la misma familia botánica están presentes el «longan», el «pulasan» o el «quenepa», frutos asiáticos tropicales de aproximadamente el mismo tamaño, aunque el «longan» tiene cáscara naranja y el «quenepa», también conocido como «limoncillo» o «mamoncillo» en español, cáscara verde y pulpa naranja.

Todos ellos están muy presentes en la gastronomía asiática y en las regiones tropicales del este de África y Latinoamérica. En el sudeste asiático, concretamente en Malasia de donde es originario, es común añadir el rambután en los curris de pescado y cerdo, en combinación con tofu y piña o acompañando unas gambas marinadas, además de en zumos y todo tipo de postres y mermeladas.

Pulpa blanca del rambután dentro de la que está la semilla del árbol

Propiedades del rambután

Es una frutilla ligera, baja en calorías y rica en vitamina C. En cuanto a azúcar, tiene casi la misma cantidad que el plátano, unos 14,5 g por cada 100 g, que no la hace apta para dietas cetogénicas pero sí para cualquier patrón de dieta saludable y para cualquier chef que quiere redescubrir una frutilla tropical como parte de curris y postres asiáticos.

Bajo en calorías y muy fresco al paladar

Es una de esas frutillas que puedes tomar en tanda casi sin darte cuenta y no tener miedo a ninguna consecuencia indeseable. Con un aporte de tan sólo 63 kcal por cada 100 g y un sabor muy refrescante, es ideal para apagar el calor y añadir un extra de vitaminas a nuestro día.

Rico en vitamina C

Aún con una carne blanca y translúcida que no haría presagiarlo, es muy rico en vitamina C, una de las vitaminas más conocidas por su poder antioxidante. Además, la vitamina C ayuda a la absorción de hierro, también presente, promueve el correcto funcionamiento del sistema inmune y está involucrada en la síntesis de diversas hormonas.

Beneficios del rambután

Tiene muchos beneficios para la salud, pero, además, está en el centro de las últimas investigaciones por su potencial para convertirse en suplemento anti-edad y como posible tratamiento de la diabetes tipo 2, gracias a la acción hipoglucémica de ciertas partes del fruto. Por descontado, su perfil nutricional también lo convierte en un estupendo aliado para mantener o perder peso.

Ayuda a perder peso

Con su bajo perfil calórico y cero grasas es una de las frutas adecuadas para conseguir la pérdida de peso ya que contribuye al déficit calórico mientras continúa aportando vitamina C y minerales, así como para mantener nuestro peso deseado.

Antioxidante y antiedad

Tiene un buen contenido en vitamina C, que es muy antioxidante y contribuye a mantener nuestro organismo joven, pero no sólo eso. La semilla y la piel contienen un sinfín de compuestos antioxidantes que previamente tratados, no es conveniente consumir ni hacer uso directo de éstos, puede convertirse en una crema rejuvenecedora e incluso en un complemento para la salud que atenúa el envejecimiento de hígado y riñones, tal y como comprobaron en esta revisión.

Potencial tratamiento para la diabetes tipo 2

Está en el punto de mira por su posible rol en la prevención y regulación de la diabetes. La investigación se ha llevado a cabo hasta ahora con cáscara y semillas, una parte de la fruta que, aunque en altas dosis podría ser tóxica, en las dosis adecuadas y tratadas en laboratorio consiguen ayudar a mejorar la respuesta al azúcar del páncreas y a disminuir el ritmo de absorción de azúcares, ambos, factores claves para prevenir y tratar la diabetes tipo 2. No obstante, es importante recordar que los estudios han sido llevados a cabo con extractos medidos y sintetizados en laboratorios, no con el consumo directo de estas partes del rambután.

Contraindicaciones del rambután

¿Es una fruta peligrosa? No necesariamente. Algunos estudios se han centrado en observar los efectos del extracto de piel de rambután en ratas comprobando que, si bien a altas dosis llega a modificar el funcionamiento del hígado, no necesariamente causa la muerte. De igual manera se han evaluado los síntomas de toxicidad de las semillas, pero no parece haberse encontrado ninguna contraindicación sobre la pulpa blanca. Por lo tanto, el consejo general para evitar posibles inconvenientes es evitar consumir piel y semilla y como siempre, seguir el consejo médico.

Valores nutricionales del rambután

Es una frutilla tropical muy baja en calorías y muy rica en vitamina C, llegando a aportar hasta el 60% de la cantidad diaria recomendada y con un apreciable aporte de hierro que varía entre el 10% y el 13% de la cantidad diaria recomendada por cada 100 g de rambután.

  • Energía: 63 kcal
  • Hidratos de Carbono: 14,5 g
  • Grasas: 0 g
  • Proteínas: 0,8 g
  • Hierro: 0,3 / 1,0 mg – 13 % del CDR
  • Vitamina C: 20 – 45 mg / 26 – 60 % del CDR
Cesta llena de rambutanes para su comercializacion y venta

Cómo comer rambután

El fruto puede comerse crudo, lavándolo con agua fría, retirando la cáscara, comiendo la pulpa y desechando la semilla. Su sabor es fresco y jugoso, similar al del lichi, y combina bien con otras frutas tropicales. También se puede cocer y dorar ligeramente para incorporarlo en platos salados o cubrir en azúcar y canela y hervir para conseguir una increíble compota.

Sabor del rambután

Es una frutilla exótica que es difícil de olvidar. Su cáscara con pelos puntiagudos, pero no sedosos, su carne blanquecina y su gran semilla negra son todo un espectáculo para quien la descubre por primera vez.

Cortar la cáscara es fácil porque es blanda, fina y deja al descubierto fácilmente la pulpa. Esta es propiamente el fruto y tiene un sabor peculiar, jugoso, fresco, con un toque volátil, algo así como un regusto etílico que aparece vagamente tras engullir el primer bocado y que hace que no pueda compararse con ninguna otra fruta exótica.

Uso en la cocina del rambután

Para aquellos para los que el rambután es una fruta desconocida, les asombrará descubrir todos los usos que tiene en cocina. Desde el más tradicional, como tentempié a media mañana crudo, hasta decorando una tarta de chocolate, agregando textura a un curry tailandés o como compota de postre a falta de manzanas.

Como combina muy bien con otras frutas tropicales, también podemos preparar un fresco batido de pepino, agua de coco y rambután para empezar el día con energía, o añadirlo a nuestro smoothie, jugo o granola de preferencia.

Recetas con rambután

Las recetas con este ingrediente incluyen su adición a un clásico curry rojo con langostinos, previamente cocida y dorada la fruta. También la posibilidad de preparar una mermelada siguiendo los mismos pasos que seguiríamos para una mermelada de kumquat o la de añadirlo a nuestro próximo Martini para dejar impactados a nuestros invitados. Si nos sentimos aventureros, un pudding con rambután y leche de coco o helado de rambután también pueden ser excelentes ideas para dar un giro definitivo a nuestros menús.