Fenogreco: qué es, propiedades, beneficios y cómo tomar esta semilla

Semillas de fenogreco en un tarro de cristal
El fenogreco es una planta y su semilla tienes diferentes usos, entre ellos el culinario. Te descubrimos qué es el fenogreco exactamente, que beneficios tiene el consumo de fenogreco (y también sus contraindicaciones) y cómo puedes puedes usarlo en tus recetas.
Por Héctor Hernández
28 de enero de 2021

Hay ingredientes que acompañan al ser humano desde la antigüedad. Uno de ellos es el fenogreco, una planta utilizada de múltiples formas, desde el campo de la medicina al de la cosmética. Sin embargo, es en la gastronomía donde su uso se extiende de maneras increíbles. Se puede consumir germinado, en especia, tostando las semillas, como harina o como suplemento, es un gran aliado para deportistas y resulta ideal para estimular el apetito o tratar la diabetes. Sigue leyendo para descubrir qué es exactamente el fenogreco, todos los beneficios y contraindicaciones que se asocian con su consumo o las formas de comerlo y disfrutarlo en tus recetas.

¿Qué es el fenogreco?

El fenogreco es una planta anual de la familia de las fabáceas o leguminosas. Puede medir entre 20 y 50 centímetros de altura. Se cree que tiene su origen en los países mediterráneos, el norte de África y Asia occidental. Sus semillas son la parte más valiosa de la planta. Las semillas crudas son de color dorado con sabor amargo debido a los aceites volátiles y los alcaloides que contiene y que puede reducirse con el tostado. Estas proceden de su fruto en forma de vaina, que suele contener entre 10 y 20 semillas de aspecto duro y cuadrado. Son de naturaleza fibrosa, pegajosa y gomosa.

Es un producto muy particular que acompañó a los egipcios en sus rituales religiosos en los procesos de embalsamado por su peculiar aroma; mientras que las mujeres de Oriente Medio tomaban esta planta con la idea de que les ayudaría a producir más leche. Actualmente, sigue siendo uno de los ingredientes notables de algunos platillos típicos de Oriente Medio.

Flores de la planta alholva

Propiedades y beneficios del fenogreco

Los principios activos presentes en las semillas de fenogrecole confieren propiedades beneficiosas para el sistema digestivo, efectos antiinflamatorios que pueden aliviar distintas dolencias, nutrientes muy interesantes en la regulación del azúcar en sangre y el funcionamiento del sistema endocrino o usos en la medicina tradicional para aliviar dolores. Repasamos las distintas propiedades y beneficios asociados al consumo de fenogreco, considerado en general un fortificante natural.

Ayuda a cuidar nuestro sistema digestivo

Las semillas de fenogreco se emplean en la recuperación del apetito y la regulación de la digestión. Una de sus compuestos, la trigonelina, tiene diferentes usos entre los que se encuentra estimular el apetito en dietas ideadas para ganar peso (por ejemplo en casos de anorexia) por sus efectos anorexígenos. Además, favorece el buen funcionamiento del aparato digestivo gracias a su contenido en mucílagos (que ayuda a mantener en buen estado la mucosa estomacal) y de hecho es un recurso eficaz para tratar la gastritis y los cólicos, tiene un suave efecto laxante frente al estreñimiento y sus propiedades antiinflamatorias pueden servir frente a dolencias como la dispepsia o a distensión abdominal.

Posee efectos antiinflamatorios y antiespasmódicos

Esos efectos antiinflamatorios a los que hacíamos alusión y que responden al contenido del fenogreco en fitosteroles, diosgina, fitoestrógenos o alcaloides pueden ejercer beneficios más allá del sistema digestivo. Sumado al efecto antiespasmódico del fenogreco, permite aliviar diferentes dolencias que pueden estar relacionadas con la menstruación. De igual manera, el fenogreco se ha usado en la medicina tradicional para aliviar dolores e inflamaciones en articulaciones y músculos.

Es beneficioso para el sistema endocrino

El fenogreco se emplea también por sus beneficios sobre el sistema endocrino y en particular sobre la producción de insulina, ayudando a regular los niveles de glucosa en sangre. La razón la encontramos en su composición y en particular en su contenido en 4-hidroxiisoleucina, un aminoácido. La trigonelina actúa aquí también a la hora de evitar desequilibrios en nuestros niveles de azúcar. Además, se le atribuyen beneficios como hepatoprotector y en dietas de pérdida de peso.

Semillas de fenogreco

Puede emplearse para cuidar la piel

Asimismo, las semillas, la harina y hasta las infusiones de fenogreco son utilizadas de forma externa para combatir afecciones como el acné, los eccemas, forúnculos y abscesos, pero también para tratar algunos síntomas relacionados con la conjuntivitis. Su uso tópico para tratar problemas de piel en la medicina tradicional es habitual, para lo cual se suele mezclar con algún liquido hasta obtener una pasta que se puede aplicar directamente sobre la piel y que pasados unos minutos se aclara con agua.

Contraindicaciones del fenogreco

Un consumo excesivo de fenogreco podría provocar molestias estomacales como diarrea o hipoglucemia. Además, no está recomendado para personas alérgicas a las legumbres, embarazadas o menores de edad, y mucha precaución en caso de consumirlo si se sigue tratamiento médico.

Diarrea y flatulencias

Los efectos secundarios más corrientes del consumo de fenogreco están relacionados con nuestro sistema digestivo. Y es que igual que su consumo moderado puede ser beneficioso, su composición en fibra podría provocar episodios de flatulencias o diarrea que podrían ser mayores si se consume en grandes cantidades, llegando a causar dispepsia o distensión abdominal.

Hipoglucemia

Consumido en grandes dosis, el fenogreco podría pasar de ser un buen recurso para controlar la glucemia a provocar hipoglucemia, es decir, niveles bajos de glucosa en sangre. Podría provocar un retraso en el vaciado gástrico, disminuir la absorción de carbohidratos y aumentar la sensibilidad a la insulina de los tejidos.

Planta alholva o fenogreco

Reacciones alérgicas

Las personas alérgicas a los cacahuetes, la soja, los garbanzos o los guisantes verdes deben evitar el consumo de fenogreco. En realidad, todas las personas que presentan reacciones alérgicas frente a la familia de las fabáceas o leguminosas son susceptibles de sufrir efectos secundarios o deseados derivados del consumo de fenogreco. También cabe prestar especial atención si se está siguiendo tratamiento médico, en cuyo caso siempre se recomienda consultar con un médico o especialista.

En caso de que se consuma fenogreco de forma simultánea al consumo de otros medicamentos es necesario consultar previamente con un especialista, pues podrías aparecer interacciones indeseadas. El moderado efecto anticoagulante del fenogreco puede ser contraindicado en caso de que se tomen medicamentos anticoagulantes, antiplaquetarios o antiinflamatorios. Cabe prestar especial atención en personas con tratamientos crónicos.

No recomendado a embarazadas o menores de edad

Los especialistas recomiendan evitar el consumo de fenogreco en embarazadas por la presencia de cumarinas y alcaloides, potencialmente tóxicos para el sistema hepato-renal y con efectos hipotensores que podrían provocar complicaciones durante la gestación del feto. En el caso de madres lactantes simplemente se advierte del fenogreco que podría alterar ligeramente el sabor de la leche materna. También debe evitarse su consumo en menores de edad y especialmente en niños menores de 2 años.

Cómo tomar el fenogreco: Usos en la cocina

Su potente sabor amargo y su aroma que guarda cierto parecido con el curry, hacen del fenogreco una delicia culinaria ideal para dar un toque exótico a diferentes comidas. Debido a sus cualidades aromáticas se emplea como especia en la cocina de algunos países, especialmente la asiática.

En la India, las semillas se consumen desecadas enteras y, a veces, ligeramente tostadas para realzar su sabor para realizar numerosos platos, como el khakhra, un pan plano muy popular entre la etnia Guyarat. Además, son el ingrediente fundamental en la preparación de la halawa, un dulce típico de Oriente Medio, India, Pakistán e Irán, que luego se endulza con miel o azúcar.

Las semillas también se pueden tomar molidas o bien dejándolas en remojo durante un día para ablandarlas, aunque del fenogreco se consume casi todas las partes de la planta. Las hojas, por ejemplo, se comen crudas en ensaladas en Tailandia; en Yemen se emplean como condimento principal del saltah, el plato nacional; mientras que en Irán se usa para hacer Qormeh sabzi, un estofado tradicional de la cocina persa, en el que se mezclan distintas hierbas aromáticas salteadas.

Se puede consumir en germinados

De este modo, la hoja se puede consumir al natural o deshidratada y se puede añadir directamente a los guisos y platos de cuchara sin que sea necesario molerlas antes. Tener un frasco de fenogreco en la despensa puede ser un gran aliado para las comidas y para hacer mezclas de especias.

También queda muy bien con panes, salsas, cuscús, sopas, ensaladas, vinagretas, encurtidos de verduras o frutos secos. Igualmente, las semillas pueden servirse como aperitivo solo, y la harina de este producto es ideal para usar en repostería, para tartas y bizcochos diferentes, así como para preparar pan. En Europa se consume como germinados, que se realizan con las semillas, y se comen crudos para acompañar las ensaladas, a las que le aporta un picor particular.

Aunque su nombre no resuena mucho en los supermercados españoles, seguramente te habrás encontrado alguna vez con un plato que lleve este ingrediente fundamental de la tradición de Medio Oriente y que ha sido utilizado en gastronomía y medicina por sus grandes beneficios, sabor potente y peculiares características.