Aunque normalmente sea una metodología de gestión propia de restaurantes o almacenes para gestionar los productos, el método FIFO es tan útil, fácil y rápido que en cuanto lo descubras querrás ponerlo en práctica en casa cuanto antes. Al aplicarlo tanto en la despensa como en la nevera mantendrás un control sobre los alimentos, los utilizarás cuando estén en perfectas condiciones y además reducirás el desperdicio.
Qué significa el método FIFO
De las siglas en inglés «First In, First Out», el método FIFO es una técnica organizativa en la que lo primero que entra es lo primero que sale. De hecho es el método utilizado por establecimientos como supermercados o restaurantes para mover y rotar los diferentes productos alimenticios con los que trabajan sin correr el riesgo de que caduquen o de la fecha ideal para su venta.
Cómo colocar los alimentos con el método FIFO
Lo más importante para aplicar el método FIFO es almacenar los productos adecuadamente de manera que al abrir la despensa o la nevera cojas los productos que tengan la fecha de caducidad más próxima, aunque ello implique mover todos los alimentos cada vez que haces la compra para reorganizarlo todo.
Cómo aplicar el método FIFO en la despensa
La mejor manera de aplicar el método es organizando la despensa de manera que los productos más antiguos queden en la parte delantera y sean los más accesibles. Coloca los nuevos productos en la parte de detrás y deja la parte de delante para los más antiguos. Así serán los primeros que veas cuando necesites cualquiera de ellos.
Cómo aplicar el método FIFO en la nevera
Para aplicar el método en la nevera te recomendamos primero hacer limpieza y verificar todos los alimentos que tengas guardados. Desecha los que ya no sirvan y da uso a los que estén empezados o tengan la fecha de caducidad próxima. Una vez hecho esto, como antes coloca los nuevos ingredientes en la parte trasera de la nevera dejando los que llevan más tiempo y están abiertos en la parte de delante. De esta manera utilizarás primero los alimentos más antiguos asegurándote de no tener que tirar nada de comida.
Consejos para aplicar el método FIFO
Ahora que sabes lo que es el método FIFO así como la manera correcta de aplicarlo tanto en la despensa como en la nevera, te proponemos una serie de consejos adicionales para garantizar que consumes los alimentos antes de que se echen a perder y minimices el desperdicio de comida en casa.
Etiquetar los productos
Para hacer un seguimiento del método FIFO la primera recomendación (y lo que hacen los chefs) es etiquetar y fechar los productos. En el caso de productos envasados generalmente ya llevan tanto la etiqueta como la fecha de caducidad, pero en caso de que cocinemos en casa lo mejor es poner la fecha en la que fue elaborada o comprada cada cosa. Puedes hacerlo de dos maneras: con pegatinas de quita y pon o utilizando un rotulador de pizarra blanca que puedas borrar fácilmente.
Agruparlos por categorías
Organizar los alimentos por categorías te ayudará a tener mayor visibilidad de ellos, mantener tanto la despensa como la nevera más organizadas y optimizar el espacio. Además de esta manera será mucho más fácil planificar tus comidas diarias. En la despensa, podrás guardar los productos como más te convenga.
Revisar su caducidad y limpiar regularmente
Aunque tengamos un método infalible para la conservación y rotación de nuestros productos alimenticios, es de vital importancia que revisemos regularmente la despensa y la nevera para asegurarnos de utilizarlos antes de que caduquen. Por ejemplo, limpiando semanalmente la nevera y la despensa te asegurarás de que todos los alimentos están en perfecto estado y matas dos pájaros de un tiro. Además aplicando este simple gesto sabrás perfectamente qué tienes tanto en un sitio como en otro evitando que olvides algún alimento en la parte de detrás del todo.