La masa básica para hacer los crepes salados no puede ser más sencilla: huevos, leche, harina, un poco de mantequilla y sal. Con la proporción adecuada de estos ingredientes, conseguiremos realizar una de las recetas más populares de nuestros vecinos franceses, cuyo origen se dice que surgió, más concretamente, en la Bretaña francesa. Hoy en día su elaboración y consumo se ha extendido por prácticamente toda Europa e incluso en países latinoamericanos como Venezuela son muy populares, donde se les conocen como panquecas o panqueques.
Los crepes salados los podemos rellenar con infinidad de combinaciones de ingredientes, mis favoritos son, sin duda, los siguientes: el clásico crep enrollado con jamón cocido y queso; con queso crema y salmón ahumado; rellenos de crema de champiñones y pollo; con revuelto de setas y gambas; rellenos de pollo con guacamole o incluso enrollarlos con salsa boloñesa y hacer unos canelones gratinados con queso.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 5 minutos
- Tiempo de cocinado: 20 minutos
- Tiempo total: 25 minutos (más unos 30 minutos de reposo)
- Raciones: 8, 16 unidades
- Categoría: plato principal
- Tipo de cocina: francesa
- Calorías por ración (kcal): 160
Ingredientes de los crepes salados para 8 personas
Para la masa de los crepes:
- 2 huevos
- 500 ml de leche entera
- 180 g de harina de trigo de todo uso
- 1 cucharada sopera de mantequilla derretida
- 4 g de sal fina
- Mantequilla para engrasar la sartén
Para el relleno:
- 1 muslo de pollo deshuesado
- 60 g de queso gouda
- 250 ml de salsa bechamel espesa
Cómo hacer crepes salados
Lo primero que tenemos que hacer es echar en un recipiente 2 huevos, si son camperos mucho mejor, 500 ml de leche entera y mezclar enérgicamente con unas varillas hasta que se integren. Incorporamos 180 g de harina de trigo de todo uso previamente tamizada y mezclamos de nuevo hasta obtener una mezcla homogénea.
Por último, incorporamos 1 cucharada sopera de mantequilla derretida junto con 4 g de sal fina. Mezclamos con las varillas hasta que no queden grumos. Refrigeramos la mezcla resultante al menos durante 30 minutos para que la masa adquiera una mayor consistencia.
Pasado este tiempo, engrasamos una sartén con un poco de mantequilla y cuando esté caliente echamos la cantidad justa de masa para cubrir por completo el fondo de la sartén. Lo ideal es que nos queden unos crepes finitos por lo que no debemos echar demasiada cantidad.
Dejamos cocinar el crepe por un lado a fuego medio-alto durante 1 minuto y medio aproximadamente.
En el momento en que veamos que el borde del crepe comienza a despegarse será el momento justo para darle la vuelta.
Cocemos el crep 1 minuto más por el otro lado y cuando esté hecho, lo retiramos de la sartén para dejarlo sobre un plato en el podemos ir apilándolos mientras los vamos haciendo.
Una vez tengamos todos los crepes hechos, los podremos usar para rellenar con los ingredientes que más nos gusten. En esta ocasión he optado por mezclar 1 muslo de pollo deshuesado, hecho a la plancha y posteriormente picado con 60 g de queso rallado tipo gouda y 250 ml de salsa bechamel espesa. ¡Anímate a probarlo, está delicioso!
Resumen fácil de preparación
- Bate los huevos con la leche hasta integrar, agrega la harina e integra de nuevo
- Añade la mantequilla derretida y la sal, mezcla hasta que no haya grumos y deja reposar en la nevera 30 minutos
- Engrasa una sartén antiadherente con mantequilla y cuando esté caliente echa una porción de la masa
- Cocina el crep durante 1 minuto y medio
- Cuando el borde se despegue dale la vuelta
- Cocina por el otro lado 1 minuto y retira. Continúa de la misma forma con toda la masa
- Rellena los crepes a tu gusto y, ¡a disfrutar!
