Se cuenta que el pepito de ternera nació en Madrid en una taberna. El hijo del dueño, al que llamaban Pepito, siempre pasaba por allí y comía bocadillos de embutido. Un día pidió que le hicieran un filete y se lo metieran en pan. Así la gente comenzó a pedir un bocadillo como el de Pepito y surgió el nombre. Después se ha extendido por toda la geografía del país y podemos encontrarlo en la carta de cualquiera de los bares que sirven bocadillos.
Más allá de historias con más o menos fundamento, lo ideal de este bocadillo es consumirlo en el momento, con una buena carne y un pan bien crujiente del día. Se puede acompañar de queso, de pimientos o de tomate, pero como más gusta es de la forma tradicional: la carne simplemente a la plancha vuelta y vuelta y como mucho acompañarla de unos ajitos fritos.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 5 minutos
- Tiempo de cocción: 3 minutos
- Tiempo total: 8 minutos
- Raciones: 1
- Categoría: plato principal
- Tipo de cocina: española
- Calorías: 365 kcal por cada 100 g
Ingredientes del pepito de ternera para 1 persona
- 2 filetes de ternera (solomillo, tapilla o cadera)
- 2 dientes de ajo (opcional)
- Pan de bocadillo (reciente del día)
- Aceite de oliva virgen extra (1 cucharada)
- Sal en escamas
Cómo hacer el pepito de ternera
Para hacer un buen pepito de ternera lo fundamental y más importante es elegir una carne de primera calidad y un corte que se adapte a la receta. Lo ideal es elegir partes de carne que sean fáciles de morder y que no tengan muchos nervios. Las partes más recomendadas son el solomillo, la cadera, la tapilla… Son partes que se pueden filetear estupendamente, y vuelta y vuelta en la sartén están de muerte.
Preparamos los filetes y los partimos en trozos medianos. Quitamos algún nervio que puedan tener y los reservamos hasta el momento del cocinado.
En una sartén doramos unos ajos laminados. Es importante no quemarlos pues dará mal sabor al aceite y amargarán nuestro bocadillo. Sacamos los ajos cuando se doren y los reservamos para el emplatado.
En la misma sartén en la que hemos dorado los ajitos calentamos el aceite y cuando humee es el momento perfecto para poner la carne. La haremos vuelta y vuelta para que quede al punto, bien blandita y rosa por dentro.
Para montar el bocadillo abrimos el pan a la mitad. El pan tiene que ser crujiente y del día.
En la parte inferior colocamos los filetes a la plancha y colocamos los ajitos. También le añadimos un poco de sal en escamas. La sal siempre se pone en la carne después de hacerla, así evitaremos que expulse los jugos que nos interesa que queden en su interior para que al comerla esté jugosa y llena de sabor.
La parte de arriba del pan la mojamos con el jugo que ha soltado la carne en la sartén y tapamos nuestro bocadillo. El mordisco ha de ser crujiente, suave como mantequilla y con un sabor espectacular. Podemos acompañar el pepito de ternera con un vino tinto o una cerveza, será un plan redondo.
Resumen fácil de preparación
- Preparar los filetes de ternera, cortarlos de tamaño medio y quitar algún nervio que puedan tener
- Dorar los ajitos en la sartén sin quemarlos y reservar para montar el bocadillo
- En la misma sartén calentar el aceite y cuando humee hacer los filetes a la plancha vuelta y vuelta que la carne quede al punto
- Abrir el pan y montar el bocadillo colocando los filetes en la rebanada inferior
- Añadir los ajitos fritos y mojar la tapa del pan con los jugos que suelta la carne en la sartén
- Poner la tapa al bocadillo y acompañarlo de una copa de vino tinto o de una cerveza