El restaurante Cinc Sentits resume su filosofía de una forma del todo concreta: «la clave de un buen plato está en encontrar y utilizar ingredientes de la mejor calidad». Así que siendo consecuentes con ella, se han asegurado de construir su cocina sobre los sólidos cimientos de una gran materia prima que llega a las cocinas de la barcelonesa calle Aribau desde múltiples puntos de España.

El pescado salvaje de las lonjas donde en cada momento se encuentre el mejor. La leche, la nata y la ternera de los Pirineos catalanes, esta última de su indicación geográfica protegida. El foie gras de la comarca catalana del Bajo Ampurdán. El cochinillo ibérico de Extremadura. El azafrán de Jiloca, una comarca aragonesa. Las avellanas de la localidad de Reus. El queso artesanal de pequeñas poblaciones de Cataluña. Las verduras de las huertas del Maresme. Las patatas de Prades, otra indicación geográfica protegida. Y el caviar del Valle de Arán.

Con esta más que suculenta y local despensa, Jordi Artal, el artífice de esta casa, elabora un menú degustación que se bifurca en dos: un menú de cuatro platos y otro de seis. Además de una fórmula para el mediodía pensada para comer bien y con la necesaria agilidad que exigen los días laborables. Sin cartas ni primeros platos, pero sí con novedades constantes y clásicos especialmente valorados por los comensales.

Hablamos de elaboraciones inspiradas en la cocina tradicional que hacen de los contrastes su seña de identidad. Recetas que juegan con las texturas, la disposición de los ingredientes en el plato, de acuerdo a la intencionalidad del chef, y la presentación en sí misma. Con salsas y caldos que no enmascaran, cocciones medidas al milímetro y la inventiva en su máximo apogeo.
De este modo se articula una culinaria que es una verdadera travesía, a lo largo y ancho del país, en busca de los mejores sabores. Una aventura gastronómica que viaja de extremo a extremo con el único objetivo de encontrar lo mejor y ofrecerlo de un modo diferente. Todo, sin moverse de una mesa del Ensanche barcelonés.

El Cinc Sentits juega además con especiales caldos del país, encontrando para su bodega producciones limitadas, vinos de pequeñas bodegas o referencias que recuperan variedades y modos de elaboración perdidos y olvidados. Con este trabajo, se ha llegado a componer una muestra con más de dos centenares de nombres que se seleccionan para maridar con el menú degustación del restaurante. Al frente de la sala, garantizando un trato más que amable para un restaurante con una estrella Michelin como este, está Amèlia Artal.
Cinc Sentits
Calle Entença, 6008015 Barcelona
933239490
cincsentits.com
Catalana, Creativa
60€-120€