El mundo de las ginebras se encuentra en un momento excepcional aupado por las nuevas modas y corrientes que han convertido al gintonic en el combinado de referencia. En esta situación son muchas las empresas que apuestan por destilados de tipo premium o propuestas fusión que tratan de captar la atención de un público movido por la innovación y las tendencias. Sin embargo, este sector ya cuenta con actores de prestigio con décadas de trabajo a sus espaldas y una reputación obtenida a base de aroma, sabor y tradición.
Seagram's es una de las ginebras clásicas en la barra de cualquier establecimiento, un icono que se mantiene casi inalterado desde su creación. Su historia se remonta más de 150 años atrás en el tiempo, concretamente hasta 1857, cuando George Randall, William Roos y William Hespeler fundaron Waterloo Distillery en la ciudad canadiense de Ontario. Sin embargo, sería en 1869 cuando Joseph E. Seagram entraría en la empresa. En 1883 se convertiría en el único propietario, cambiando el nombre de la destilería por el de Joseph E. Seagram & Sons.
Joseph falleció en 1919, pero su destilería pasaría a manos de la Distiller Corporation en 1928, quien compró los derechos de la marca a su hijo Edward Seagram y conservó el nombre. En una época conflictiva donde imperaba la ley seca, la empresa de Samuel Bronfman supo guardar sus existencias hasta la abolición de la ley en 1933. Aunque inicialmente dieron salida a todas las provisiones de whisky, en 1940 la ginebra Seagram's llegaba de forma oficial a la barra de los establecimientos de todo el país en su formato Extra Dry Gin.
El crecimiento de la empresa de Bronfman fue exponencial desde ese momento, convirtiéndose en uno de los mayores productores de destilados alcohólicos de todo el mundo con la ginebra Seagram's en catálogo, que lograron convertir en el destilado de referencia gracias a la publicidad con imágenes aristocráticas publicada en prensa y capaz de atraer a una gran variedad de públicos y culturas.
Durante décadas la Distiller Corporation explotó los diferentes destilados que comercializaban y diversificó sus líneas de negocio a través de inversiones en la industria del petróleo o mediante participaciones en la industria del entrenamiento y el cine, labor que continuó su hijo hasta que en el año 2000 la empresa desaparecía y la división de bebidas pasaba a manos del grupo francés Pernod Ricard.
Esta ginebra galardonada ofrece un sabor suave y seco. Está elaborada a partir de una receta donde solo se conoce el empleo de bayas de enebro, naranja dulce y amarga, cilantro y angélica, además de varios aceites esenciales secretos. Una combionación de botánicos de gran calidad traídos desde todas las partes del mundo y alcohol neutro que garantiza un aspecto limpio y transparente con ligeros reflejos de oro. Ha sabido adaptarse a los tiempos con un halo de sofisticación y un estilo inequívocamente tradicional, una receta antigua que recoge la mejor herencia estadounidense de los destilados para traerla de vuelta a los nuevos tiempos. Se presenta en una botella de 70cl con formas irregulares en sus laterales, textura con relieve y escudo de la familia Seagram en la parte frontal.
