Piedra Prohibida: de la imaginación a la realidad

Botella Piedra Prohibida
Miriam Clotet
El sueño de una familia que quiso convertir su afición en una realidad. Un equipo de profesionales que buscan ante todo la excelencia en la extensión más grande de viñedo antiguos en una sola pieza de la DO Toro.
Por Míriam Clotet
17 de noviembre de 2020
Vinos

Ya hace casi 22 años que Estancia Piedra, ubicada en el Valle de la Guareña, elabora vinos con sus 35 hectáreas. La primera parcela fue plantada en 1968 y su uva autóctona, la Tinta de Toro, ha encontrado allí un lugar para quedarse. Pero claro no todo en el monte es orégano dicen y hoy ocupa nuestras líneas un 100% garnacha, simplemente por llevar un poco la contraria.

Al margen de la DO Toro, el escocés Grant Stein y su mujer Anna fundaron esta bodega en el año 1998 que hoy es emblemática en la zona. En Pago de Bocarrage encontraron unas cepas viejas de Garnacha diseminadas entre cepas de Tinta de Toro que decidieron recuperar. ¿Y por qué decimos que están al margen? Actualmente la DO Toro no reconoce los monovarietales de garnacha y por lo tanto este tinto se comercializa “al margen de la ley” (disculpad la broma fácil) pero quiero decir que no está amparado en ningún reglamento, solamente lo avala el trabajo que hay detrás.

Mapa de Viñedos de Estancia PiedraEstancia Piedra

Por lo tanto no resulta raro que este vino se llame Piedra Prohibida, evidentemente, porque en realidad igual que la manzana prohibida del árbol prohibido estamos delante de un vino que no ha estado reconocido y por lo tanto también un poco prohibido. Actualmente, el tanto por ciento máximo de Garnacha permitido en los cupajes de los vinos de la DO es del 25%, por lo tanto (y es más que evidente) quedan descartados los monovarietales. En Estancia Piedra siempre han creído en este ensamblaje, independientemente de los sellos que pudieran estar relacionados.

Desde 2016 el enólogo de la bodega, Pepe Hidalgo, había mostrado interés por las Garnachas que se estaban elaborando en zonas con predilección por las alturas. Creyó firmemente que los viñedos de Estancia Piedra podrían estar al nivel de otras zonas vitivinícolas de similares características y apostó. No hace falta que os diga que fue un caballo ganador.

Vendimia Estancia PiedraEstancia Piedra

A punto de salir la añada 2019, yo pruebo una 2018 que está en su perfecto punto de consumo. Fruta en su versión más fresca de un vino con mucho carácter. Jugoso y con aromas de fruta roja. No os dejéis engañar por la concentración de los vinos de la zona, este la tiene pero la acompaña con una acidez y frescor tan grandes que os parecerá estar bebiendo uno de los vinos más frescos que hayas probado jamás.

Perfume sutil de una leve crianza. Carrera de largo recorrido. Camino prohibido que hace falta recorrer para descubrir todo lo que nos depara el paraje.

Y aunque hoy ocupan nuestras líneas uno de sus vinos, me gustaría destacar otro punto clave de la bodega. Este proyecto decidió ir más allá y no quedarse solo en el vino. Aparte de llenar la copa de hoy, Estancia Piedra quería dar un paso más en su legado y creyeron firmemente en la divulgación de la cultura del vino de la zona. Por este motivo fundaron el Centro Social de Lagarona, un lugar donde encontrar un espacio de reunión y compartir un vino mientras aprendemos la historia del lugar.

Puntos clave que definen el vino

  • Variedad: una variedad que no estaba reconocida como monovarietal dentro de la DO Toro hasta este mismo año y por lo tanto no tiene su sello. 100% garnacha de cepas de más de 50 años que subsistían tan ricamente entre cepas de Tinta de Toro.
  • Historia y enamoramiento: como ya hemos comentado, la primera parcela fue plantada en 1968, pero no fue hasta el 1998 cuando Grant Stein, buscando viñedos viejos por toda Europa, dio con este paraje. Me dice que paró a comer en un restaurante de la zona y que al probar un vino del territorio sintió mariposas en el estómago. Fue entonces cuando decidió buscar el viñedo en la zona de Toro.
  • Crianza: muy ligera para ser un vino de la zona de Toro. Tan solo 4 meses en barricas de roble francés de segundo año y 2 meses en botella que acaban de redondear el vino. En la botella ya es cosa de lo que nosotros queramos dejarlo pero resulta fácilmente irresistible.
  • Altura: los más de 700 metros sobre el nivel del mar en los cuáles se encuentran sus viñas y su orientación oeste hacen posible una perfecta maduración. Un lugar que dispone de muchas más horas de exposición solar que el resto.
  • Tecnología: la bodega está equipada con equipos modernos de elaboración enológica y las técnicas más avanzadas para llegar a la excelencia en sus vinos.
  • Curiosidad: desde la bodega me cuentan que en los restaurantes, bares y tiendas donde tienen más confianza y más presencia, los clientes ya no piden una copa de Piedra Prohibida sino una copa de Palote, haciendo referencia a la chuchería de los años noventa por sus toques a fresa y ligera nata. Es decir un auténtico caramelo.
  • Paradoja: perseguir lo que se cree siempre esté dentro de un sello geográfico o no. Las denominaciones están para asegurar una calidad pero en el momento en que las restricciones no dejan seguir el camino de un trabajo, hay que alejarse y seguir haciendo lo que se cree.

¿Quieres saber más? Datos técnicos

  • Bodega/Vigneron: Estancia Piedra
  • Zona/DOP: Toro
  • Número de botellas: la añada actual es de 8.600 botellas
  • Añada 2018
  • Variedad: 100% Garnacha
  • Altura de los viñedos: 750 metros
  • Tipo de suelo: arena y arcilla
  • Nombre de la viña: Paraje Estancia Piedra
  • Viticultura ecológica sin certificación
  • %VOL: 14,5%