Parece haberse convertido en tópico, pero es una realidad. Cada vez más viajeros visitan una ciudad desconocida y sienten la necesidad de pasear por sus mercados. Siempre que la llevemos a cabo con raciocinio, es una sana costumbre que nos permite conocer nuestro destino y, especialmente, descubrir su despensa. En Londres, la presentación entre viajante y alacena se debería producir, sí o sí, en Borough Market.
Concebido como uno de los mercados mayoristas de alimentación más importantes de la capital británica, lleva años abriendo sus puertas al público en general los miércoles, jueves, viernes y sábado, aunque su actividad fundacional fue servir a profesionales. Todo comenzó unos centenares de metros más allá de su ubicación, literalmente pegado al London Bridge. Las primeras menciones se remontan al año 1276, aunque sus responsables retrotraen su nacimiento en torno al 1014 o incluso antes.
Sea como fuera, un día su popularidad demandaba un nuevo emplazamiento alejado del puente que a mediados del siglo XVIII comenzaba a tener serios problemas de tráfico. El destino fue su actual localización, cerca de la catedral de Southwark.

Desde este enclave el Borough Market se ha convertido en referencia indiscutible. En él abundan verduras y frutas de origen local, materias primas vegetales también de origen internacional. Brillan especialmente los puestos de quesos, mayoritariamente franceses e ingleses, así como la zona de pescadería donde las ostras son mayoría. Sin faltar carnes, mariscos, pastelerías, panaderías, puestos de especias, tés o vinos.
A estos básicos imprescindibles, siempre de excelente calidad, se suman productos menos comunes, más especiales y muy codiciados por los restaurantes de la ciudad que se abastecen en este mercado, así como una grata oferta gastronómica para consumir allí mismo. Con puestos con comida casera lista para llevar, bares de comida callejera o restoranes con elaboraciones más trabajosas. Este mercado es uno de los más parecidos a un mercado convencional de España o Francia con un gran surtido de productos frescos de una enorme calidad. Si uno quiere preparar buena comida en Londres, en Borough Market comprará.