Coronado es una pequeña ciudad del condado de San Diego (California), conocida por sus idílicas playas, sus residencias de lujo y por acoger un gran número de turistas nacionales todos los veranos. No en vano, es el lugar donde se construyó en 1887 el famoso Hotel del Coronado, visitado frecuentemente por estrellas de la música, la televisión y el deporte estadounidense, además del inquilino de turno de la Casa Blanca.
Pero además de ofrecer un entorno casi paradisíaco para veraneantes, también es la sede de una joven aunque prestigiosa fábrica de cerveza. Coronado Brewing Company no tiene una trayectoria comparable a las grandes cervecerías europeas con siglos de fabricación a sus espaldas, pero en sus 20 años de historia se ha hecho un nombre importante en el mundo cervecero.
Fue el 20 de agosto de 1996 cuando los hermanos Rick y Ron Chapman, nativos de Coronado, cumplieron el sueño que llevaban años persiguiendo: abrir una pequeña brewpub con cerveza de fabricación propia en su ciudad natal. Como suele ocurrir en estos casos, los lugareños comenzaron a interesarse por la cerveza producida por los Chapman cada vez más hasta que en 1998 lograron vender su primer barril de cerveza, nada más y nada menos que al famoso Hotel del Coronado.
Desde entonces, la cervecería de la sirena, en referencia al logotipo que lucen sus productos, ha sufrido dos décadas de constante evolución, pasando de ser una compañía estrictamente local a una empresa cervecera conocida a nivel mundial, gracias a sus continuas expansiones y, sobre todo, al galardón recibido durante la World Beer Cup de 2014 que le acreditaba como la mejor cervecería de tamaño medio del mundo.
Coronado BA Stupid Stout, una Imperial Stout madurada en barrica de roble
Una de las cervezas más destacables entre las decenas de productos de Coronado Brewing Co. es, sin duda, su Imperial Stout. El estilo Imperial Stout es una variedad cervecera natural de Inglaterra cuyo origen se remonta al siglo XVIII cuando los ingleses buscaban una manera de transportar cerveza a la corte de Catalina II de Rusia sin que ésta se estropeara por el camino. ¿La solución? Añadir más lúpulo a las cervezas para actuar como conservante e incrementar el contenido alcohólico de las mismas para evitar que se congelarán debido al clima frío.
Esta Coronoado Stupid Stout, nombre peculiar para una cerveza, es un perfecto ejemplo de lo anterior. Con una graduación en torno al 9% y un IBU de 42 puntos, se trata de una cerveza equilibrada, con mucho carácter, oscura, casi negra, muy densa y viscosa, con notas de chocolate que podrían hacernos pensar que estamos catando un Cola Cao alcoholizado en lugar de una cerveza. Notas que se acentúan todavía más si tenemos la gran fortuna de probar la Coronado BA Stupid Stout o Coronado Barrel Aged Stupid Stout, una versión limitada de esta cerveza, madurada en barricas de roble usadas previamente para envejecer el bourbon.
Lamentablemente, independientemente de la variedad que nos gustaría catar, al pertenecer a una pequeña microbrewería californiana, se trata de una cerveza complicada de conseguir en España. Ahora mismo sólo la distribuye en nuestro país la empresa malagueña Zombier, por lo que poder paladear esta pequeña delicia está al alcance de muy pocos afortunados. Así que si por alguna casualidad topárais con ella, no perdáis la oportunidad de probar la Coronado Imperial Stout.