¿Qué fue primero, el huevo o la gallina? Para Chez Cocó no fue ni lo uno ni lo otro, porque para ellos, lo importante es el resultado final, el pollo, y si es asado, mejor todavía. Porque aquí, en esta rôtiserrie de aires franceses en mitad de la barcelonesa Avenida Diagonal, la volatería es la protagonista, y el pollo, su pièce de résistance.

Lo que años atrás había sido un atelier de novias, ahora es un asador dedicado a las aves. Pollo tomatero, pollo de Bresse, Lumagorri, pato de bellota, pularda, pichón de Las Landas... Dando vueltas y asándose à la broche, a la espera de que escojas uno para desgustar y lo acompañes con algún que otro entrante de temporada. Verás que aquí no hay secretos, atraviesas la puerta de cristal y entras por la cocina, ves directamente lo que ahí 'se cuece'.
Los responsables, antes de convertir el espacio donde se hacían cortes al biés, pliegues y puntadas con hilo de seda, en un restaurante, inspeccionaron el mercado y vieron que faltaba la venta de piezas enteras en la cocina actual. Como explica el señor de la casa, Enrique Valentí, "la idea era recuperar los antiguos asadores y apostar por ello". Así que se fueron a París en busca del mejor artesano que hiciese la broche (el espetón) y dieron con el maestro Jean-Pierre. Y el resto, es Chez Cocó.

En esta firme apuesta por recuperar la esencia de las clásicas rôtisseries, con una cocina abierta desde donde puedes contemplar las entrañas del restaurante, el espacio principal te trasladará a los salones tradicionales de la Provenza. Mosaicos artesanales, ollas de cobre, y suelos de damero en barro formado por más de quince modelos de baldosas hidráulicas a modo de alfombra con motivos geométricos, serán sólo el aperitivo de este viaje francés. Para continuar con la aventura provenzal, el comedor está decorado con bancos inspirados en el Orient Express y respaldados por dorados paneles florales con cierto aire asiático. Para potenciar la altura, los huecos en el techo se han decorado con molduras y grandes florones de escayola, de los que cuelgan gigantescas lámparas señoriales de diferentes formas y tonalidades.

Una vez que te has aclimatado a la travesía visual decorativa y ya te has sentado en uno de los sofás aterciopelados, te queda por disfrutar del elemento estrella de la rôtisserie: una pieza de tres asadores coronada por un espejo central restaurado que data del siglo XIX. Una auténtica obra de arte. Tras deleitarte con esta majestuosidad, tu vista se detendrá en los protagonistas absolutos de la sala, las aves que se preparan, asan enteras y giran como bailarinas a la vista, ensartadas en los largos espetones. El fin de este ritual, es recuperar la mágica liturgia de ‘trinchar’, con una maestría especial, las viandas delante de ti.

Si, más que de pichón, pollo o pato, tienes antojo de carne, tus deseos también serán cumplidos. En su horno castellano, alicatado con mosaicos pintados a mano y alimentado con leña de encina, prepara y dora lechazos y cochinillos de Arévalo asados a la manera segoviana, que mezcla la textura crujiente y tostada de su piel con una carne jugosa.

Para ir abriendo apetito, aunque tal vez no lo necesites al ver la pieza de los tres asadores, puedes pedir alguno de sus entrantes, como la sobrasada de Els Casals, la brandada cremosa de bacalao o la tapenade provenzal de aceitunas. Aunque, lo mismo, prefieres cerrar el banquete con un postre, y no sería una loca ocurrencia. Dos vitrinas, un mostrador y un tradicional carrito de pastelería, exhiben una generosa variedad de tartas, cupcakes y bizcochos, con la forma del genial repostero Christian Escribà y la pastelera Patricia Schmidt.

Y ya, para poner un broche de oro a la comida o la cena, pide mesa en la terraza 'Buenos Aires', el maravilloso refugio de Chez Cocó. Un jardín de patio propio de las casonas de antaño, rodeado de una densa vegetación y aderezado con un tendido de pequeñas bombillas y grande faroles que cuelgan de una pérgola central. Pide un gin & tonic bien preparado o tu combinado preferido, recuéstate y disfruta del tiempo pasar.

Chez Cocó
Avinguda Diagonal, 465 08036 Barcelona
934449822
www.chezcoco.es
Creativa
25€-40€