William Chase Gin, una más que singular referencia

Botella de Williams Elegant 48 Gin
William Chase
William Chase opta por diferenciarse del resto de ginebras desde la base, cambiando los clásicos alcoholes de grano por uno hecho a partir de manzanas ecológicas. En cuanto a botánicos, opta de nuevo por las manzanas, los lúpulos y la flor de saúco.
Por Toni Castillo
12 de abril de 2017

Aunque la ginebra William Chase nace para satisfacer a los amantes de las referencias más clásicas, las que rebosan carácter seco y brindan el papel protagonista al enebro, no podríamos decir que este gincon botella semitransparente y pajarita con la enseña británica adornando su cuello pueda enmarcarse entre ellas.

Su singularidad la encontramos, en primer término, en algo tan esencial como el alcohol que le sirve como base. Al contrario que una amplia mayoría de destilado en general y ginebras en particular, producidas a partir de un espíritu resultante de granos fermentados, esta muestra de origen inglés opta por fermentar manzanas procedentes de cultivo ecológico. Una particularidad que define su organoléptica.

A este rasgo tremendamente distintivo, se le une la adición de tres botánicos que terminan de definirla como única en su clase: más manzanas, concretamente de la variedad «Bramley», lúpulos y flor de saúco. A ellos se unen el enebro, claro, y otros más comunes como el regaliz, el coriandro, las cortezas de limón y naranja, la raíz de angélica y la raíz de lirio.

Gracias a todo ello, esta ginebra producida en la Chase Destillery de Ledbury, ciudad comercial al oeste de Inglaterra, rebosa complejidad. En nariz presenta notas a enebro conjugada con la presencia de las manzanas, los lúpulos y el saúco, para mejorar todavía más en boca. En el paladar puede apreciarse un buen equilibrio de las notas cítricas con esas notas más especiadas y el refinamiento que proporciona la fruta tan presente en ella.

La ginebra William Chase es perfecta tanto para tomar sola como para hacerlo en combinados clásicos como el gin-tonic, el cual puede acompañarse de una lámina de manzana y un poco de canela, redondeando su carácter goloso.