Pazo Señorans Selección de Añada 2008, un albariño icónico

Botella de Pazo Señorans Selección Añada 2008
Bodega Pazo Señorans
Pazo Señorans Selección de Añada 2008 es fruto de la innovación en la elaboración del albariño, gracias a un período largo de crianza que le ha valido el reconocimiento de la crítica.
Por Elies Guzmán
09 de febrero de 2018
Vinos

Aunque como bodega se puede decir que su trayectoria es joven, la historia del Pazo Señorans hunde muy bien sus raíces en el tiempo. Se trata de uno de los mejores ejemplos de lo que son las casas solariegas gallegas, levantado en el siglo XVI, representando el señorío de épocas pasadas. Y decimos que es joven porque su historia dedicada a la producción de vino comienza en 1989, aunque sus viñedos se cultivan con anterioridad a esta fecha.

Éste es un negocio familiar que comenzó el matrimonio formado por Marisol Bueno y Javier Mareque, y en el que hoy también participan sus cuatro hijos (Marisol, Vicky, Javier y Santiago), que pretende reflejar las características y peculiaridades de la uva de la zona: el albariño. No en vano estamos en el valle del Salnés, en la provincia de Pontevedra y en la D.O. Rías Baixas, donde esta variedad de uva blanca es uno de sus máximos exponentes.

La bodega cuenta con unas características físicas que se pueden considerar privilegiadas. Son tierras bajas, con altitudes inferiores a los 300 metros sobre el nivel del mar, cercanas a éste y a los tramos finales del curso de los ríos, que en conjunto condicionan la climatología de la zona dando como resultado unas temperaturas suaves y un volumen pluviométrico elevado.

Y de uno de los mejores viñedos del pazo, el de Los Bancales que cuenta con una edad media de más de 45 años, nace Pazo Señorans Selección de Añada 2008. Un 100% albariño con una producción de 16.000 botellas que ha pasado en crianza sobre lías más de 30 meses y un mínimo de 12 en botella.

Estamos ante lo que podríamos considerar un icono de los albariños, ganador de la medalla de oro otorgada tanto por el Concurso Internacional Mundus Vino como la que concede el International Wine Challenge, además de haber obtenido puntuaciones cercanas a los 100 puntos en algunas de las guías vinícolas más prestigiosas del mundo: 98 puntos en la Guía Peñín, 92 en The Wine Advocate de Robert Parket y 97 en la Guía Gourmets.

Se trata de un vino cuya peculiaridad estriba en que fue fruto de la innovación en su elaboración, ya que Marisol Bueno, fundadora de la bodega, optó por concederle una larga crianza en depósitos de acero y luego en botella. Es por tanto uno de los más peculiares vinos albariño que podemos probar, con un intenso aroma y un gran volumen y cuerpo fruto del mencionado envejecimiento que también se deja notar en boca, desde el principio hasta el fin.